No hay error en pruebas genéticas tomadas a familiares de las víctimas de Tlahuelilpan, aseguró Raúl Arroyo, procurador de justicia del estado de Hidalgo.
Recientemente circuló en diversos medios la información de que la Procuraduría estatal habría tomado únicamente pruebas de cónyuges, lo cual, no resultaría al momento de identificar a los muertos, por no ser un familiar directo.
Sin embargo, el titular de la dependencia añadió que efectivamente esas pruebas se realizaron, pero ahora se complementaron con las de hijos y padres, como parte de los estudios que actualmente se realizan para identificar los 53 restos que alberga el Servicio Médico Forense (Semefo) en Pachuca.
El procurador añadió que se realizaron 9 pruebas complementarias el día lunes de esta semana y que si bien, primero se recabaron las de cónyuges, fue porque inicialmente fueron ellos lo que iniciaron las carpetas de investigación y fueron los primeros voluntarios en aportar pruebas.
“Las primeras pruebas se hicieron días después de la tragedia y al revisar las carpetas es como se sacan mas y se complementan”, reiteró.
Tras ocho días del ingreso de los restos al Semefo, se conoció que ya se realizó el proceso de clasificación, lo cual, determina cuales se encuentran calcinados y cuales carbonizados, de ahí dependerá si algunos son o no enviados al extranjero para continuar las investigaciones correspondientes. Hasta ahora permanecen en Pachuca.
Por los hechos ocurridos en Tlahuelilpan, se iniciaron 69 carpetas de investigación, 16 restos ya fueron identificados y entregados y se conservan los 53 ya mencionados.
Finalmente dio a conocer que para este año se tiene planeada la construcción de un panteón forense, el cual, contempla un terreno de una hectárea y más de 10 millones de pesos, los cuales, serán solicitados al Fondo de Aportación para la Seguridad Pública (FASP).