Minutos antes de las 11 horas, se llevó a cabo la misa de cuerpo presente de Mara Fernanda Castilla Miranda, joven asesinada del pasado 8 de septiembre.
La Iglesia de María Madre ubicada en la calle Zempoala de esta ciudad estuvo llena. Familiares, amigos, conocidos, compañeros de Mara se dieron cita para orar por ella y el consuelo de quienes están lastimados por su pérdida.
Desde temprana hora, una camioneta llegó a la capital del estado donde se transportaron sus amigos de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) para acompañarles, para darle el último adiós.
Fue el padre Rafael Hernández González, quien presidió la homilía y pidió orar porque regrese la paz ante la ola de violencia que azota al estado y el país.
"Pedimos a Dios que ante la ola de violencia nos devuelva la paz que necesitamos, que hemos perdido en muy poco tiempo, para recobrar la dignidad propia de la tierra y los hijos de Dios", dijo al finalizar la eucaristía.
Desolación es lo que prevalece entorno al asesinato que ha consternado al estado, al país y que se ha dado a conocer en distintas partes del mundo.