La Fiscalía General del Estado mantiene al crimen organizado como principal línea de investigación en el homicidio de Abraham Harms, partiendo de la versión de que nunca se solicitó una cantidad como rescate y por los mensajes que recibieron los agentes policiacos antes de localizar a la víctima.
El cuerpo del menonita fue localizado en la calle 94ª y San Andrés del municipio de Cuauhtémoc, con un impacto de arma de fuego en la cabeza y sin mostrar rastros de haber sufrido otro tipo de lesiones en el cuerpo.
Fueron dos personas quienes participaron en este nuevo hecho delictivo, el cual fue captado por las cámaras del restaurante y posteriormente difundido a través de las redes sociales, donde se muestra como dos pistoleros se lo llevaron a la fuerza del lugar y por varias horas nadie supo de su paradero.
Los primeros datos de la investigación establecen que Abraham Harms opuso resistencia, por lo que uno de ellos decidió dispararle en la cabeza y fue cuando lograron cargarlo y llevárselo en su propia pick up, color blanco, que horas después fue localizada abandonada y con huellas de sangre.
Cabe destacar que aunque la Unidad Especializada de Secuestros de la Fiscalía General del Estado fue la encargada de tomar como encomienda este caso como presunto secuestro y realizar las investigaciones pertinentes, horas después dictaminó que no se trataba de un secuestro, sino una privación ilegal de la libertad.
Esta unidad no logró establecer comunicación con los delincuentes quienes privaron de la libertad a Abraham Harms, toda vez que no estaban pidiendo alguna cantidad económica para dejarlo en libertad y aparentemente su principal objetivo era arrebatarle la vida por cuestiones que hasta el momento no han sido conocidas.