En las instalaciones del Hospital Ángeles, dentro del cuarto 408 fue aprehendido, por elementos de la Fiscalía General del Estado, el “empresario” de Delicias, Carlos Manuel C .A., por el delito de homicidio, luego de que el pasado 29 de enero asesinara a dos de sus escoltas y los abandonara en la carretera que conduce a Parral, totalmente calcinados.

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El hospital se encuentra resguardado por más de 30 elementos de seguridad, quienes se establecen dentro y fuera de las instalaciones, algunos vestidos de civiles y otros uniformados, el escenario es hermético por la información que se concentra de este caso, toda vez que luego de haber sido víctima de atentados y secuestros, se ha revelado que podría ser parte de una estructura criminal en Delicias, principalmente relacionado con el robo de combustible.

Bajo la causa penal 143/2020, la Fiscalía Distrito Zona Centro buscará formular cargos por el homicidio de quienes en vida llevaban el nombre de Salvador Armando M. G. y Pedro Hiram H. P. mismos que fueron torturados y asesinados por Carlos C. A. el pasado 29 de enero, por lo que en próximas horas se podrá llevar la audiencia de formulación por este doble homicidio.

Dentro de los antecedentes que han recabado de este caso, Carlos C .A. tenía contratados a Salvador Armando y Pedro Hiram como elementos de su seguridad personal, no estaban adscritos a alguna corporación, pero los mantenía a su lado, por lo cual el día que supuestamente lo privaron de la libertad, los dejaron sin vida en el tramo carretero que conduce de Satevó a Rosales.

Ese día se dio a conocer que un enfrentamiento armado habría dejado como resultado dos personas sin vida, quienes horas después se dio a conocer que ambos sujetos pertenecían a la seguridad de Carlos C.A., que intentaron impedir el “secuestro”, sin embargo, ayer se esclareció que el propio Carlos los habría matado.

El video que fue indispensable para resolver los hechos, fue el que filtró el grupo criminal de Los Salgueiro de Parral, donde se muestra al presunto empresario cortando orejas de sus dos escoltas, quienes estaban en el suelo, severamente golpeados y a quien cuestionaba el motivo por el cual lo habrían vendido.

Los videos que fueron públicos en redes sociales, trascendió que serían provenientes de su equipo celular de Carlos C. A., quien aparentemente habría decidido que los grabaran para mostrar la forma en que asesinaba a su personal de seguridad, sin saber el motivo oficial o la intención de grabarse aquel día.

Los cuerpos de esas dos personas fueron encontrados el día 29 de enero por la mañana en la orilla de la carretera a Satevó, estaban al lado de una camioneta Silverado 2019, la cual estaba baleada, al igual que las personas a quienes les prendieron fuego junto con la unidad, que fue asegurada por la Fiscalía General del Estado.

Una supuesta traición de parte de sus escoltas de seguridad, quienes lo “vendieron” con un grupo antagónico, sería el motivo por el cual Carlos decidiría asesinarlos, toda vez que conocían la información de sus movimientos, transacciones y toda la información que realizaba el presunto empresario.

El lunes 2 de marzo, Carlos C. A. retomó la conciencia luego de permanecer varias horas en recuperación, ya que luego de su escape de una casa de seguridad en Parral, fue baleado en la cara, que lo dejó gravemente herido y fue atendido con prontitud a fin de sanar sus heridas producidas por el arma de fuego.

Carlos C. A. desde el año 2019 era investigado por su presunta participación en el robo de combustible en el sur del estado, sin embargo, en una ocasión estuvo a punto de morir cuando un grupo armado intentó asesinarlo en Delicias, a lo que él refirió un día después ser una víctima inocente de los hechos y de la inseguridad del estado.

En dos ocasiones fue privado de la libertad por un grupo que opera en la ciudad de Parral, quienes el vienes 28 comenzaron a difundir una presunta declaración del ahora detenido, en el que aceptaba que robaba combustible de ductos de Pemex, la forma en que podría operar y las personas que lo ayudaban a cometer estos robos.