Habitantes coinciden en que realizar disparos una actividad de alto riesgo; hay a quienes les entraron balas a su casa. En un sondeo, coincidieron en que “matar al año viejo” pone en riesgo a las familias. Cabe citar que a principios del año, el 2 de enero, se registraron dos casos de daños a vehículos.
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Al terminarse el año, las personas tienen la tradición de tirar “vivas”; hay a quienes les parece incorrecto porque pone en riesgo la vida.
Azucena Chávez comentó que, en lugar de alegría, le trae temor debido a que el año anterior entró una bala en su casa de la colonia Gómez Morín, por fortuna sólo dañó el techo de lámina.
Felipe Nájera vive en la San Antonio y sus vecinos tienen costumbre de tirar “vivas”, lo que es peligroso; expresó que prefieren no salir o regresan antes de las 12:00 de la noche.
Manuel Herrera dijo que no tira balazos, es una actividad que no debería ser; hay familias que tienen techos de lámina y son más vulnerables.
De igual forma, Dora Flores expresó que aunque las autoridades señalen que no deben tirar vivas, se hace caso omiso; expresó que este actuar fomenta violencia.
Mario Cázares comentó que es un riesgo para toda la comunidad; por fortuna no se han presentado pérdidas humanas pero sí daños. Tiene esperanzas en que no se vayan a enlutar a familias.
Luz María Juárez detalló que cada año es la misma situación; siguen realizando esta actividad peligrosa, deberían ser más conscientes.
Alberto Yáñez dijo que procura estar en casa, no visita a sus demás familiares durante la noche debido a que es peligroso.
Por su parte, Martha Delgado, destaco que han tenido problemas por balas perdidas, su vivienda tiene techo de lámina y se perforó. Por fortuna cuando entró la bala no estaban en casa.
Mayra Pérez agregó que tirar balazos siempre se ha visto, pero que ahora ya no es tanto la tradición, sino más bien hacer escándalo.
Por último, Lulú Acosta manifestó que el año anterior cayó una bala en el vidrio frontal de su automóvil; tuvo que reponerlo y decidió no poner denuncia, ya que es difícil saber quién fue.
A principios de año, el 2 de enero, se supo de dos casos de daños a vehículos, dañaron los vidrios. En el primero una bala atravesó el quemacocos, pero no fue reportado; y el otro dañó el cristal delantero.
