Se saturan urbanos en horas pico; usuarios hacen caso omiso a choferes

Se saturan urbanos durante las primeras corridas al iniciar el día, los usuarios al no tener otro medio de transporte hacen caso omiso al aforo máximo de la unidad y se suben todos los que puedan en un solo viaje. En tanto el chofer de la unidad prefiere dejarlos abordar porque ya han sufrido represalias en caso de que les impidan abordar.

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Por otro lado, Transporte Urbano del Estado manifiesta que, dicha problemática se ha visto focalizada en ciertos horarios nada más, sin embargo, no está permitido el sobrecupo, pero usuarios hacen caso omiso a las recomendaciones.

Otro sector más que vino a ser afectado por el Covid-19 además del comercio fue el transporte público, y es que con los decretos emitidos por el Gobierno del Estado en cuanto a que, no se permitía un aforo de más del 60 por ciento por unidad, la necesidad del transporte ha superado el miedo a contagiarse.

De lo anterior, cabe destacar que, durante las primeras corridas que se van al iniciar el día, los camiones urbanos se ven saturados y muchos de ellos llevan claramente a viajantes de pie, aún y cuando está prohibido de acuerdo a las medidas de sanidad emitidas por la entidad.

Esta situación se presenta más que nada entre las 7:30 y 9:00 horas de la mañana, incluso durante los últimos viajes de la noche, aproximadamente a las 19:00 y 20:00 horas.

Sin embargo se entrevistó a tres usuarios que abordaron el transporte, mismos que externaron que a pesar del temor que tienen por contraer el virus, la necesidad los supera, no cuentan con otro medio de transporte para trasladarse desde sus hogares al trabajo, consecuentemente tampoco con el dinero suficiente para acceder a un carro de sitio diariamente, por lo que tienen que usar este medio.

Es el caso de Herlinda Gómez, ama de hogar y madre de dos niños, quien manifestó que, tiene claro el riesgo de usar el transporte urbano diariamente, pero debe salir a trabajar para llevar el sustento a su hogar, ya sea que vaya lleno o no el camión.

De lo anterior Erick Acosta, explicó que, no tiene otro medio para ir de su casa al centro, debido a que vive en la periferia ni siquiera contempla caminar para llegar a su destino, debe hacer uso del urbano.

El miedo pasa a segundo plano, cuando existe la necesidad de trabajar para ganar dinero y más por la pandemia, uno toma las medidas necesarias y evitar contagiarse, ya sea usar cubre bocas y gel antibacterial, compartió Socorro Delgado.

Sin embargo los choferes también juegan un papel importante a la hora de respetar el aforo del 60 por ciento permitido, ya que se han dado casos donde sufren represalias al impedir que suban más personas de la cuenta.

Llega el momento en que todos los asientos son ocupados, entonces el chofer detiene a la siguiente persona a punto de abordar, le explica el motivo del porque ya no puede dejarlo subir, sin embargo esta se molesta y de rayadas de madre no lo bajan.

Lo anterior fue dado a conocer por el representante del gremio de transportistas, Josué Ontiveros, quien dijo que, comúnmente pasa que al final del día le llegan quejas, donde los choferes han sufrido ataques verbales por parte de usuarios, ya que no se les permitió abordar en cierta parada para evitar el sobrecupo o que fueran de pie.

En tanto el director de transporte urbano del estado David Holguín, explicó que, se han presentado situaciones en toda la entidad, donde los transportistas son agredidos por los mismos que los abordan.

Confirmó que, se tienen registros donde el caso del exceso de aforo en las unidades se da principalmente por las mañanas cuando acuden al trabajo y de noche que van de regreso a casa.

Sin embargo la ocupación máxima sigue siendo la misma, y tanto como el chofer y la persona en cuestión deben respetar las recomendaciones de sanidad emitidas, no obstante están conscientes que es complicado hacer entender a la sociedad en masa que cumplan estas normas, y sobre todo se desquiten con quienes ofrecen el servicio.

Concluyó haciendo mención que existen sanciones si los transportes públicos no acatan las reglas establecidas, mientras que una solución puede ser una flota más grande camiones para que aborden cierto número de ocupantes nada más, existe la limitante que no hay los medios suficientes para realizarlo.