Chihuahua, Chih.- La atención al contexto es importante en la Sierra Tarahumara, sobre todo en el ámbito escolar porque las condiciones en las que viven las niñas y los niños son diferentes y no se cumple con las necesidades de aprendizaje, coincidieron los participantes en el foro Aquí Estamos: Dignidad para la Sierra Chihuahuense.
En el tema de educación y seguridad se dijo que el narcotráfico es creciente, ha sido una violencia sistemática desde hace más de 40 años, lo cual es un delito penado por el estado, pero a la vez es incentivada ante la falta de oportunidades para el desarrollo y la educación, pues solo el 40 por ciento de los profesores que imparten clases en la Sierra Tarahumara son bilingües.
La antropóloga social Aitza Miroslava Calixto Rojas señaló que el Estado no puede seguir mandado maestros y maestras sin recursos materiales y sobre todo que no entiendan lo que es hacer escuela en un espacio de resistencia, donde pareciera que lo menos que puede importar es la educación.
En las comunidades indígenas se implementó la estrategia de escuela castellanizadora y no contemplaron las diferencia, esa huella no se elimina con un programa de educación intercultural, ya que para muchos es una posibilidad de fututo o de perder a la persona que se envía a la persona al olvidarse de su origen, señaló Aitza Miroslava Calixto Rojas, maestra en Antropología Social.
Agregó que la educación interculturalidad se dirige solo a los pueblos originarios, como su los demás (mestizos) no necesitaran de una reflexión intercultural. “En la sierra hace falta la atención al contexto, debido a todas las capas de discriminación y violencia que están sucediendo”.
En su parte, María Antonia Barragán Cruz docente frente a grupo en educación preescolar de San Ignacio de Arareko en Creel, en el municipio de Bocoyna señaló que las niñas y niños van avanzando en sus aprendizajes pero en realidad el Plan Nacional de Educación mide a todos por igual sin importar el contexto.
Una de las ventajas de la pandemia, es que las niñas y niños están viviendo en sus comunidades, aprendiendo de su cultura, practicando de su lengua. María Antonia mencionó que ellos solo tienen educación presencial debido a las limitaciones de la tecnología, donde han podido convivir más con las familias y el entorno en el que se desenvuelven los estudiantes.
De la misma manera, José Isidro Morales Moreno, licenciado en Educación Primaria y maestro en Lingüística Indoamericana señaló que muchos de los contenidos están descontextualizados, desde las palabras que se usan de región en región.
La palabra educación para el ralámuli no existe una palabra relacionada por lo que se debería cambiar el nombre de estas actividades.
Por parte del Estado, José Armando Rey Manríquez, director de atención a la transversalidad de los Servicios Educativos del Estado de Chihuahua destacó que la pandemia agravó las brechas de desigualdad.
Los libros de primero y segundo grado están publicados en lengua materna de los 4 pueblos originarios de Chihuahua, además los de tercero y cuarto ya están listos pero aun no han sido publicados, es parte de lo que se está haciendo para tutelar los derechos de las niñas y niños.
En Chihuahua de los mil maestros que se encuentran en la Sierra Tarahumara solo 400 se reconocen bilingües, es decir hablan alguna de las lenguas originarias y español.
Ante ello, en alianza con la radiodifusora XETAR se trasmiten clases de lunes a sábado, primero por espacio de una hora y luego por 90 minutos, donde la metodología es un proyecto didáctico que ataca aspectos educación inicial, preescolar y primaria.