Chihuahua, Chih.- Los miembros y representantes de la industria privada en Chihuahua manifestaron que la aprobación de la reforma a la ley de la industria eléctrica es un atentado contra la ecología, un retroceso en materia de energías, un detonante de incontables demandas y un declive para la competitividad.
Lo anterior fue señalado por Francisco Santini, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE); Jorge Cruz Camberos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex); Román Rivas, presidente de Index y Antonio Valadez, presidente de la Cámara de la Industria de la Transformación.
Cruz Camberos señaló entre sus declaraciones que “Esta es una reforma que perjudica a las industrias y a los tratados comerciales de México como el T-MEC. Los que van a salir ganando aquí son los abogados, van a tener mucha chamba”.
Por su parte, Francisco Santini puntualizó que “estas afectaciones son para salvar una empresa pública, del estado, que no funciona como lo es la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y esos costos del mal funcionamiento los vamos a tener que pagar los ciudadanos en nuestros recibos, y en un futuro con nuestros hijos por la gran contaminación que se va a generar”.
En el mismo sentido, Antonio Valadez sentenció que este retroceso no solo afecta económica o competitivamente, sino también de manera social, al alejar las fuentes de empleo; mientras que Román Rivas explicó que a la industria les preocupa que un inversionista no pueda decidir poner una planta de energía limpia en el país, porque no sería un negocio.
La reforma a la Ley de la Industria Eléctrica fue aprobada en el Senado el pasado 2 de marzo, lo que señalan los miembros de la industria privada como un retroceso en materia energética, como un golpe a la competitividad del país, al tener fuentes de energía que cuestan mucho y además son contaminantes.
“Esta es una reforma que perjudica a las industrias y a los tratados comerciales de México como el T-MEC. Los que van a salir ganando aquí son los abogados, van a tener mucha chamba”, explicó Jorge Cruz Camberos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Chihuahua.
Cruz Camberos puntualizó que esto deja claro que no hay un Estado de derecho, por lo que pueden previsualizar que vienen unas cascadas de amparos por parte de las empresas que se vean perjudicadas.
Francisco Santini, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, manifestó que el gobierno federal está mandando una instrucción que va en contra de las empresas, de los ciudadanos y del medioambiente.
“Estas afectaciones son para salvar una empresa pública, del Estado, que no funciona, como lo es la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y esos costos del mal funcionamiento los vamos a tener que pagar los ciudadanos en nuestros recibos, y en un futuro con nuestros hijos por la gran contaminación que se va a generar”, explicó el titular del sector empresarial.
Por su parte, Antonio Valadez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Chihuahua, puntualizó que “en este sentido estamos mandando una señal equivocada hacia los mercados internacionales, porque hay mucha inversión extranjera a partir de la apertura de la energía eléctrica, y que se encuentra trabajando en nuestro país”.
Así mismo, explicó que las afectaciones no sólo serán económicas, de competitividad o jurídicas, pues también habrá repercusiones sociales, al no haber nuevas inversiones y más empresas para cubrir la demanda de empleo por parte de la ciudadanía.
Index Chihuahua señala que está preocupado por la percepción que pueda dar a México la entrada en vigor por parte de esta reforma, pues la modificación anterior buscaba hacer al país más competitivo y tener energías más limpias.
“Con esta reforma vamos a depender de energías que favorecen a un monopolio que debería estar desapareciendo; a nosotros como industria nos preocupa que un inversionista no pueda decidir poner una planta de energía limpia en el país, porque no sería negocio”.