Parral, Chih.- En el marco del Día Internacional de Concienciación del Autismo se llevaron a cabo actividades en la plaza de la Identidad por parte de la asociación “Autismo Parral”, quien atiende 30 niños de la ciudad con este trastorno, se dieron prendedores azules en forma de corazón al público, además se hizo la entrega de taparroscas para el DIF municipal.
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Blanca Talamantes, integrante de la Asociación, indicó que el autismo es una discapacidad relativa al desarrollo mental que típicamente aparece durante los tres primeros años de vida. Es resultado de un trastorno neurológico que afecta el funcionamiento del cerebro. El autismo y sus comportamientos asociados pueden ocurrir en uno de cada 60 individuos.
Informó que en la asociación son alrededor de 40 padres de familia que se unieron para promocionar la conciencia entre las personas sobre este problema, el cual puede ser desde leve hasta severo, el cual incapacita al menor para llevar una interacción social normal.
Durante la mañana de hoy se estuvieron entregando prendedores azules a las personas, color que es utilizado para la campaña de concientización, así también se colocaron calcomanías en los autos del crucero de la 20 de noviembre a un costado de San José, los miembros de la asociación aportaron siete costales con taparroscas en apoyo al DIF para que sean destinadas a los niños con cáncer.
Señaló que el Trastorno del Espectro Autista (TEA) es un trastorno cerebral con el que se nace. Afecta a la comunicación y a la interacción social y va acompañado de patrones de comportamiento e intereses restringidos y repetitivos. Donde se define el autismo como un trastorno del neurodesarrollo.
Además indicó que este trastorno afecta a las áreas de interacción social, habilidades de comunicación y a las funciones ejecutivas y cognitivas, ocasionando dificultades en el aprendizaje, el juego, la comunicación y la conducta. Un niño con autismo presenta síntomas en sus movimientos corporales estereotipos, anomalías en la emisión, forma y contenido del lenguaje, marcadas anomalías en la comunicación no verbal, insistencia irracional en el seguimiento de rutinas, intereses o actividades restringidos y déficit en la reciprocidad social o emocional.