La guía de manejo de cadáveres de personas que perdieron la vida por Covid-19, expedida por la Secretaría de Salud del Gobierno de México, sugiere que la disposición final sea lo más pronto posible, y que preferiblemente sea por el método de cremación, cuyas cenizas pueden ser objeto de manipulación sin que supongan un riesgo de contagio.
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En caso de no ser posible, se practicará la inhumación en sepultura o bóveda, para lo cual será necesario el traslado del cuerpo en una bolsa especial biodegradable para cadáver, con las características técnicas sanitarias de resistencia a la presión de los gases en su interior; e impermeabilidad. La bolsa puede introducirse al féretro, luego de haber sido desinfectada, y de esa manera, la manipulación exterior del ataúd, no provoca riesgos, y el entierro se podrá realizar en las condiciones habituales.
La Secretaría de Salud mencionó que aunque no hay evidencia de contagio de personas fallecidas por Covid-19, deben ser manejados de acuerdo a la Ley General de Salud en Materia de Control Sanitario de la Disposición de Órganos, Tejidos y Cadáveres de Seres Humanos, y ponderó el respeto por la dignidad humana y la relación con los deudos, a quienes se debe alertar no tocar ni besar el cuerpo y que a la entrega, la familia ya debe contar con un plan de disposición del cuerpo y servicios funerarios.
Por su parte, el personal de funerarias no deberán realizar embalsamamientos en caso de no contar con equipo de protección personal y capacitación de su uso adecuado. Los deudos podrán recibir el pésame si se encuentran asintomáticos, sin concentraciones de personas en áreas pequeñas; aunque la SS aconseja evitar rituales fúnebres, en caso de realizarse se recomienda que sólo sean cuatro horas, con féretro cerrado y menos de 20 personas.
∙ Gráfica con medidas de prevención para el personal que interviene en disposición de cadáveres, en los procedimientos de manejo y traslado, cuidados mortuorios, necropsia.
Lavado de manos.
Uso de guantes no estériles.
Mascarilla quirúrgica.
Bata impermeable con manga larga.
Protección ocular.
En la necropsia se sustituye la mascarilla quirúrgica por la N-95.