Con alegría y ofreciendo sus notas musicales que salen de sus instrumentos (guitarra y acordeón), Adrián Chávez y Antonio Hernández, todos los días salen de sus hogares, al primer cuadro de la ciudad a realizar los que les apasiona y así ayudarse económicamente, alegrando a los parralenses que se deleitan con sus interpretaciones, ya sea en los camiones, restaurantes y bares.
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Lo anterior, fue expresado por ambos jóvenes, al ser abordados por el reportero de esta Casa Editora, donde destacaron que no siempre se unen para tocar, que, lo hacen de vez en cuando, ante lo cual su acompañamiento con los instrumentos que tocan se escucha mejor.
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Cabe indicar que estos dos músicos urbanos, son de un grupo de varios jóvenes que también, buscan con su talento, una ayuda económica, sobretodo tocando en los camiones urbanos que parten de la plaza Guillermo Baca hacia las diferentes colonias de la ciudad.
Ambos jóvenes, comparten un gran gusto por la música, el arte de combinar los sonidos en una secuencia temporal, atendiendo las leyes de la armonía, la melodía y el ritmo, que se producen con los instrumentos musicales.
Este par de talentos parralenses, salen a diario a ofrecer su talento, en los camiones, restaurantes, bares y en ocasiones los contratan, para fiestas particulares, donde su fuerte es la música con sonido sierreña.
Adrián Chávez, cuenta con veinte años de edad, comentó que el gusto por la música y por tocar este instrumento de cuerdas, le vino de estar viendo videos y que ya son diez años de estar rascándole a la guitarra, donde han sido cuatro las que ha tenido.
Resaltando que él labora en la obra, pero que este día no hubo chamba y se vino temprano a "rascarle a la guitarra", para sacar algo, ya que el acostumbra a tocar por las tardes.
Por su parte, Antonio Hernández, de 28 años, señaló que él trae la música en la sangre por parte de la familia de su señor padre, y que toca varios instrumentos, como el acordeón, guitarra, trompeta, bajo, batería, un poquito de todo, es un músico natural.
Al preguntarles, que si tenían algún nombre artístico, mencionaron que no, sólo son amigos y se acoplan en ocasiones para tocar, resaltando que inician a darle más o menos de las diez de la mañana a cuatro de la tarde, con la meta de poder ganar arriba de 200 pesos.
Para concluir, afirmaron que esto lo hacen por gusto, pero también lo ven como una oportunidad de trabajo, ya que, con la colaboración de las personas, les genera un beneficio económico.