Tiene 18 años, es estudiante del Tecnológico de Parral y se gana la vida vendiendo flores a los enamorados, Carlos Campos se gana su propio dinero cada día en la avenida Independencia donde ofrece girasoles y rosas a los conductores.
Recibe las noticias más importantes directo a tu WhatsApp
Con la finalidad de mejorar su rutina diaria, aparte del sustento que obtiene de sus padres, Carlos Alberto Campos González de 18 años sale día a día a vender ramos de flores.
Instalado bajo los pies de la estatua a Miguel Hidalgo y donde se encuentra el teatro del mismo nombre, se gana la vida ofreciendo a los conductores los ramos de rosas y girasoles para las parejas que día a día transcurren por ahí.
Recién ingresa a las aulas del Tecnológico de Parral y considera que la venta de ramos y de arreglos florales sí deja buenas ventas.
“Hay días que está difícil la venta, pero sí es un buen negocio, las flores necesitan un cuidado especial, normalmente provienen del sur del país y tenemos que darle un cuidado delicado para poder ofrecerla al cliente", mencionó.
Destacó que sus ventas son mayores cuando se traslada a ofrecer su producto en bares y discotecas, sin embargo esto es difícil ya que no siempre se les permiten la entrada a vendedores.
No tiene pareja y al preguntarle si alguna de sus amigas ha recibido una de las flores que él vende contestó: “Siempre eh dicho que los negocios y las amistades no se mezclan”.
Indicó que los ramos de girasoles son más caros costando entre 180 y 200 pesos el arreglo, mientras que las rosas están entre 60 y 80 pesos y el ramo a 160 pesos aproximadamente.
Aunque es joven, ya conoce la temporada del producto que él ofrece, ya que subrayó que a diferencia del día de los enamorados en San Valentín, es el día de las madres es donde se vende más.