Con alegría los niños de primaria reciben la apertura de las cooperativas en las escuelas, ahora llamadas tiendas escolares. Durante los recesos escalonados, los niños se apresuran a salir de los salones para formarse en las filas que despachan uno a uno a los pequeños, mientras los profesores dan la indicación para que “No se amontonen y guarden su distancia” ya que es uno de los requisitos sanitarios para poder operar, cabe señalar que no todas las escuelas han abierto su tiendas, ya que apenas comienzan a reabrirse por la pandemia.
La Secretaría de Educación y Deporte de Gobierno del Estado ha estado mandando los oficios a cada una de las escuelas para formalizar la apertura de las tiendas escolares; sin embargo, no todas las escuelas de educación básica han recibido dicho oficio, donde indicaron que hace mucha falta, ya que obtienen recursos para gastos de la institución, por lo que algunas otras se va a esperar hasta analizarlo en Consejo Técnico para determinar si es factible abrirlas.
Una de las tienditas que ya se encuentra trabajando es la de la escuela primaria Niños Héroes 2101, donde la escuela separó al alumnado en dos grupos durante los descansos, de primero a cuarto grado a las 10:30 de la mañana y de quinto y sexto grado a las 11:00 horas, esto con la finalidad de continuar con las medidas sanitarias, ya que es requisito continuar con las recomendaciones como uso del cubrebocas, sana distancia y aplicación de gel antibacterial.
Durante los recesos antes llamados “Recreos”, los niños salen de sus salones para jugar y consumir alimentos. Son los más pequeños de los primeros grados, los primeros en apresurarse para acudir a comprar bajo el grito “Ya abrieron la tiendita”, los demás niños se apresuran para tener un buen lugar en la fila, mientras que los maestros los cuidan para que respeten la sana distancia, se coloquen su cubrebocas, se pongan gel en las manos antes y después de comprar, entre otras recomendaciones.
La señora que despacha y su ayudante van atendiendo a cada uno de los niños de dos en dos, estos con dinero en mano van pidiendo cosa por cosa, la mayoría compra sus dulces; sin embargo, en el local también son muy solicitadas las gorditas y dobladas, incluso hay niños que llevan lonche que les ponen los padres de familia, como es el sándwich de jamón, bebidas de chocolate, jugos, alguna manzana o plátano de fruta, sin embargo, a pesar de que llevan su lonche para el recreo, no dejan de comprar algo en la tiendita.
Uno de los planteles que aún no abren su tiendita es la escuela primaria Manuel Acuña, ya que están esperando el escrito para poder echar a andar su cooperativa, la profesora Wendy Rentería indicó que la tienda escolar es trabajada por una persona que se hace cargo. Mediante un acuerdo, esta persona paga una renta y los recursos que genera son utilizados para gastos del plantel; así también, dijo que además de ofrecer dulces y golosinas, esta debe de tener alimentos sanos para el consumo de los niños. Otra de las escuelas que decidió esperarse es la Federico Stallforth, que tomará en cuenta a los padres de familia y lo analizará en Consejo Técnico para abrir su tienda escolar.