Temperaturas gélidas y nevadas benefician a más de 200 productores nogaleros de Balleza; incentivaron la maduración de hasta 525 hectáreas de nogal; luego de que ayer amaneciera nevado en algunas comunidades de dicho municipio; el jefe de la Sader el distrito dio a conocer que las horas frío favorecen a la maduración de la nuez.
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Saúl Carbajal Loya, Jefe de la Sader en el distrito, ha compartido que las bajas temperaturas y las horas frías derivadas de las nevadas han creado un entorno propicio para la maduración óptima de la nuez.
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En este sentido, durante su pronunciamiento destacó la importancia de los fenómenos climáticos invernales en el ciclo de vida de los nogales y, por ende, en la productividad de los agricultores nogaleros.
La noticia de que más de 200 productores están siendo beneficiados por este fenómeno refuerza la idea de que las condiciones climáticas extremas, cuando son favorables, pueden tener un impacto directo y positivo en la agricultura local.
Además el jefe de la Sader en la región integrada por Guachochi, Balleza y Guadalupe y Calvo, indicó que la respuesta inmediata de los nogaleros a las nevadas subraya la importancia de la adaptabilidad y la capacidad de aprovechar las oportunidades.
El entrevistado expuso que son 525 hectáreas en producción y 400 hectáreas en desarrollo, que dan un total 925 totales; en este sentido, se destacó que la nuez en producción es el que se beneficia principalmente.
Horas frío benefician cultivo de nuez
Expuso que la nuez se beneficia de las horas frío debido a un fenómeno conocido como "requerimiento de frío" u "horas frío". Este fenómeno es esencial para el proceso de dormancia invernal de ciertas plantas de nuez, como el nogal.
Durante el invierno, los árboles de nuez entran en un estado de reposo inactivo conocido como dormancia, que es crucial para su desarrollo saludable y la producción de frutas.
Las horas frío se refieren al número de horas a temperaturas bajas, generalmente entre 0°C y 7°C, que un árbol experimenta durante el período invernal. Este período de frío provoca cambios bioquímicos en la planta, incluyendo la activación de enzimas que son esenciales para su crecimiento y desarrollo adecuados.
En el caso de la nuez, las horas frío son especialmente importantes para la formación de yemas florales. La dormancia invernal y las horas frío adecuadas son esenciales para romper la dormancia y estimular la floración y, eventualmente, la formación de frutas. Sin estas horas frío, los árboles de nuez pueden experimentar problemas en el desarrollo de yemas, lo que afectaría negativamente la producción de nueces.
Resumió que las horas frío son un componente crítico del ciclo de vida de los nogales, ya que contribuyen significativamente al éxito de la floración, polinización y fructificación, lo que se traduce en una producción de nueces más abundante y saludable.
