Hoy es Miércoles de Ceniza, celebración litúrgica con la que inicia el tiempo de Cuaresma, en donde la Iglesia Católica llama a la feligresía a entrar en espíritu penitencial y estar en cercanía con Dios.
El obispo Mauricio Urrea Carrillo, declaró “Acuérdense que el Miércoles de Ceniza es un día muy santo, junto con el Viernes Santo al final de la Cuaresma, obliga el ayuno y la abstinencia de carne, a las personas de 14 a 59 años, se trata de que se revalore desde un punto espiritual esas antiguas tradiciones, el ayuno es un mandato de la iglesia para todos, para recordar que en este día inicia un tiempo favorable de gracia y se entra por la puerta estrecha de la penitencia”.
La Cuaresma está envuelta de costumbres, tradiciones que le dan viabilidad, no solamente es un llamado, una cuestión espiritual, se expresa en símbolos culturales externos, que todos conocemos, “mejorar el corazón es mejorarnos como comunidad”.
“En plena sintonía con lo que el papa Francisco nos dice sobre los tiempos litúrgicos, la Cuaresma es un tiempo propicio, todos enfrentamos no solamente por la pandemia, su flagelo, sus consecuencias sino también por las situaciones sociales de nuestras comunidades, desafíos, problemas, riesgos, que requieren de nosotros, lo que el papa ha llamado es a una conversión personal y comunitaria, justamente la Cuaresma es un tiempo propicio para eso, porque se nos dan los medios para conseguirlo, el ayuno, oración, limosna, cercanía a Dios, vivir los oficios de la iglesia, la celebraciones, y sobre todo juntos”, refirió el líder pastoral.
En este tiempo la Iglesia llama a la feligresía a entrar en este espíritu penitencial, que naturalmente tiene un beneficio para las personas.
Al respecto Urrea Carrillo comentó “Las costumbres o las prácticas penitenciales propias de la Cuaresma, apuntan a que la feligresía y cada uno de los fieles en lo personal se preparen para la Semana Santa, porque está llena de días santos, el martes crismal cuando se bendicen en la catedral los aceites sagrados, que se utilizan en los sacramentos, el Jueves Santo cuando tenemos la celebración de la Cena del Señor, donde Jesús instituyó la Eucaristía y el Sacerdocio, y un día muy intenso que es el Viernes Santo, un día que desde temprano, inicia con el Viacrucis y demás rezos”, finalizó el Obispo
El entrevistado resaltó que desde que inició la pandemia se estableció que la imposición de la ceniza en el fiel fuera esparcida sobre la cabeza, y no el contacto con las personas para evitar la propagación del virus, “trazando la señal de la cruz, y diciendo las palabras tradicionales, arrepiéntete y cree en el evangelio o recuerda que polvo eres y en polvo te convertirás, es un llamado a aprovechar el tiempo”.
Cabe mencionar que las celebraciones se llevarán a cabo conforme lo marca el semáforo epidemiológico en color amarillo, el cual establece un aforo del 50 por ciento en iglesias, así como el uso del cubrebocas y el gel antibacterial.