Kilo de tortilla se encuentra hasta en 22 pesos, en el último año ha subido cuatro pesos; además la leche subió hasta los 24 pesos; representando un aumento de seis pesos; lo anterior repercute directamente en la economía familiar, ya que son fluctuaciones de hasta el 25 por ciento.
Mediante un recorrido por tiendas supermercados para checar costos de artículos de la canasta básica, esta casa editora detectó que la tortilla subió un 18 por ciento. Lo anterior se toma en cuenta ya que en publicaciones realizadas por este medio de comunicación, se detectó que a principios de 2021, la leche se encontraba en 18 pesos el litro.
De igual forma, el análisis del precio de la leche arrojó un incremento del 25 por ciento, ya que a principios de el año pasado el litro se encontraba en 18 pesos; al día de hoy, se pagan hasta 24 pesos.
Asimismo, el comportamiento del precio del huevo también ha tenido una tendencia al alta, tomando en cuenta que tiendas ofertan hasta en 45 pesos kilo de huevo, que representa un aumento del 33 por ciento en comparación con los 30 pesos que costaba a inicios de 2021.
Se destaca que el precio del huevo fluctúa dependiendo del establecimiento, ya que en tiendas departamentales se logró detectar el precio hasta en 43.90 pesos.
En el caso del limón, se ha reportado en repetidas ocasiones que continúa subiendo, a inicios de 2021 el precio estaba en 16.58 pesos, mientras que a la fecha se encuentra en 89.90 en algunas tiendas. Solo en el transcurso de un mes, este artículo básico subió casi 10 pesos, ya que se encontraba en 79 pesos aproximadamente; dependiendo del establecimiento.
En su momento, se dio a conocer por parte de Álvaro López Ríos, secretario general de la Unión de Trabajadores Agrícolas (UNTA) que el precio del limón continuaría subiendo durante tres o cuatro meses.
Según la información de Gobierno Federal, la canasta básica está conformada por 40 productos, que van desde artículos de limpieza e higiene personal hasta productos alimentarios. Cabe señalar que toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad; sin embargo, los precios y sus aumentos pueden llegar a generar impedimentos para su adquisición.
Finalmente se destaca que las autoridades en funciones del Gobierno de México tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad alimentaria.