Solo un tercio de la población de Santa Cruz de Villegas, sigue radicando en la comunidad que corresponde a la cabecera municipal de Parral, hace 20 años habitaban 30 familias, ahora solo quedan 10 de ellas, las cuales se dedican a la actividad agropecuaria, la mayoría de los jóvenes que ha emigrado es para continuar estudiando y trabajar en lugares como Chihuahua y los Estados Unidos.
La comunidad de Santa Cruz de Villegas, se encuentra a 27 kilómetros de Parral y está ubicada a un costado de la carretera Vía Corta a Chihuahua, el tiempo estimado de Parral a la comunidad son 25 minutos de camino, los habitantes que actualmente se encuentran viviendo en el poblado, se dedican principalmente a la agricultura y la ganadería, la mayor parte de sus habitantes son personas adultas que han encontrado en su comunidad su hogar, difícilmente para ellos el pensar en emigrar.
Eduardo Villegas, habitante de la comunidad, indicó que con el tiempo ha venido mermando la población de este lugar, hace 20 años vivían alrededor de 30 familias, todas ellas dedicadas a las actividades de la agricultura y la ganadería, ahora quedan 10 familias, donde son pocos los niños y jóvenes del poblado, comentó que la mayoría de los jóvenes se han ido a trabajar a Parral, Chihuahua capital y a ciudades de los Estados Unidos.
Informó que esta comunidad era un mancomún, pero con el tiempo, se repartieron las tierras y ahora son pequeña propiedad, Don Eduardo ha crecido toda su vida en Santa Cruz de Villegas, criando vacas lecheras, dijo que los tres últimos años han sido muy difíciles, además de la pandemia, han sido años de sequía y para mantener los hatos ganaderos han tenido que vender vacas para dar de comer a las demás.
Esta cuestión de vender el ganado en tiempos de crisis, ha hecho que hayan disminuido los hatos de los productores de carne y leche, además de que las pasturas y suplementos alimenticios se encuentran caros para mantener el ganado, dijo que una bolsa de 40 kilos de salvado tiene un precio de 230 pesos, y el llamado Ganaleche, para las vacas lecheras, tiene un costo de 310 pesos.
Así también, indicó que para darle un valor agregado a su leche, se convirtió en productor de asaderos, una actividad que ha realizado por años, ya que considero que la leche como producto no le dejaba mucha ganancia; sin embargo, con los asaderos ya tiene entregas en Parral y lo ha mantenido a flote, consideró que hay que seguir adelante, posiblemente vienen mejores tiempos, sobre todo para los jóvenes que son los que van a continuar trabajando por el desarrollo del país.