La evolución del oficio, de las tradicionales barberías a los modernos barbershop con diversidad de productos y servicios para los jóvenes clientes; las tendencias urbanas impulsan la transformación del sector barbero.
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Alexis González Hinostroza, barbero con varios años de experiencia manifestó que en los últimos años, el oficio de barbero ha experimentado una notable transformación para adaptarse a las necesidades y demandas de las tendencias actuales.
Manifestó que lo que solía ser un lugar exclusivamente reservado para el corte de cabello y afeitado tradicional, ha evolucionado hacia los modernos barbershop, donde se ofrecen productos, ropa y accesorios diseñados para satisfacer las exigencias de un sector joven de la población, comprendido entre los 12 y 35 años.
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Las tradicionales barberías, con sus sillas de cuero y espejos antiguos, han sido reemplazadas en cierta medida por los vibrantes y modernos barbershop. Estos establecimientos han sabido captar la atención de un público más joven al ofrecer una experiencia completa que va más allá del simple corte de pelo.
De acuerdo a lo observado en recorridos, los barbershop han adoptado una estética urbana y contemporánea, convirtiéndose en espacios que combinan la peluquería clásica con el estilo de vida moderno.
En este sentido, el barbero Cristian Chávez manifestó que una de las claves del éxito de los barbershop es su capacidad para adaptarse a las tendencias urbanas y a las demandas de sus clientes más jóvenes.
Expresó que además de ofrecer servicios de barbería tradicional, estos establecimientos han ampliado su gama de productos y servicios para incluir el cuidado de la barba, el diseño de estilos de vello facial, tratamientos capilares especializados y una amplia variedad de productos para el cuidado personal masculino.
Carlos Rascón Valles aseguró que en consonancia con las preferencias de la generación actual, los barbershop también se han convertido en puntos de encuentro social. Muchos de ellos ofrecen un ambiente relajado y acogedor, con música contemporánea, televisores, mesas de billar y áreas de espera confortables.
El entrevistado comentó que estos lugares se han convertido en espacios de socialización, donde los clientes pueden reunirse, conversar y compartir sus experiencias mientras disfrutan de los servicios de barbería.
Todos coincidieron en que la creciente popularidad de los barbershop ha impulsado un aumento en la demanda de profesionales capacitados en este campo. Muchos barberos también se han convertido en influencers de estilo, compartiendo consejos y tutoriales en las redes sociales para llegar a un público más amplio y mantenerse al tanto de las últimas tendencias.