Cumple don Israel Rodríguez 40 años con su programa radiofónico; “Buenas, pero que requeté buenas noches”, este espacio se ha vuelto ya toda una tradición para los radioescuchas de la XEGD, el cual ha mantenido la audiencia por su peculiar estilo de la conducción, programa de radio que nació de la idea de que se transmitiera por las noches, para la gente del campo.
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Israel Rodríguez Ruiz, conductor del programa de radio, señaló que se siente muy contento de haber estado en al gusto de la gente por tatos años, de igual manera, indicó que el programa de corte norteño ha tenido altas y bajas; sin embargo, él continúa al frente de este espacio radiofónico, con las mismas ganas que el primer día, un sueño que tuvo desde niño.
Comenta que en Valle de Zaragoza, municipio donde él nació, cuando era niño, jugaba con sus compañeros para hacer programas de radio, recuerda cómo se metía en una caja de cartón que simulaba ser la radio, ya dentro de ella, él narraba y daba noticias, su gusto por este medio de comunicación le nació desde su infancia y siempre fue un sueño el tener un programa.
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En su plática, señala que llegó a Parral un 07 de julio de 1962, a la edad de 18 años, en un principio fue repartidor de agua con "los zepelines", en 1970 entra primero a ser parte de la policía, donde Carrera Marroquí era el presidente municipal de Parral; sin embargo, en 1974, el pasó a ser agente de Tránsito del estado, después pasó a ser municipal, actualmente lleva 49 años de servidor público en el Departamento de Tránsito.
Don Israel Rodríguez señaló que fue en 1983, cuando entró a la XEGD, fue el señor, Domingo Salayandía, el que le dio la oportunidad de incursionar en la radio, comentó que en un principio le sirvió de chofer al señor Salayandía por tres días, desde ese momento nació una amistad y le propuso que lo pusiera al frente de un programa, dedicado a la gente del campo.
El empresario radiofónico le indicó que acudiera a la estación de radio y que se reportara con María del Carmen Páez Salayandía, “la Güerita”; ya para el día siguiente, un 5 de abril de 1983, su sueño se había hecho realidad, el estar al frente de un micrófono, como él nos indicó, comenzaba una carrera como conductor de un programa que hasta la fecha, continúa en el gusto del público; “Buenas, Pero que requeté buenas noches mexicanas”.
Desde ese momento, entró con todo, como él lo refirió, se sintió como pez en el agua, nunca se puso nervioso, los controles de la cabina que tenía que manejar, no batalló nunca, aquí le prendes y aquí le apagas, a esto no le muevas, cuando prende el foco es que estamos en el aire y ya no hay que hablar, fueron todas las indicaciones que le dieron.
Dijo que su idea del programa, le vino porque la gente del rancho se ocupa desde temprana hora del día, después de almorzar, se van a ordeñar vacas, reparar los cercos, dar de comer a los animales, trabajar la tierra, acudir a sacar sus pendientes, entre otras obligaciones que por lo general, no les dan tiempo de escuchar la radio.
Es por ello, que se pensó en que este programa fuera nocturno y a una hora temprana, para que la gente del rancho los pudieran escuchar, se procuró de que las personas ya estuvieran en los ranchos, poder tener un tiempo de esparcimiento y relajación, con una programación de música norteña y ranchera que va dirigida a la gente trabajadora del campo.
Indica que nunca pensó que tuviera el éxito que tuvo, ya que diferentes localidades rurales de los municipios vecinos y del estado de Durango, lo han escuchado por 40 años consecutivos, “Tengo mucho que agradecer, por tantas llamadas que hacen al programa”, que la gente disculpe cuando se me pasa un saludo a algún rancho, ya que son muchas las localidades rurales que lo sintonizan diariamente, en un horario de 8:00 a 9:30 de la noche.
Para finalizar, agradeció el apoyo que ha tenido de la gente de Parral y de todos los municipios de la región sur del estado, ya que continuamente recibe llamadas de felicitación, incluso de los Estados Unidos, gente que vivió en el estado y ahora son connacionales que radican en el vecino país, de igual modo, espera continuar con el programa hasta que Dios se lo permita.
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