Con caravana vehicular, familiares de la niña Celeste, exigen justicia por su fallecimiento acontecido al interior de un parque acuático durante el año 2018, cuando la tragedia conmocionó a la región de Parral y sus alrededores. Son dos casos que se han registrado en dicho centro recreativo, que lo llevan a su clausura pero los amparos ante la autoridad han permitido que siga en funciones.
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Era una tarde dominical de julio del año 2018, cuando la familia de Celeste se encontraba disfrutando de la convivencia en una de las albercas del centro acuático Santa Rita, cuando sobrevino la tragedia, la menor se quedó atrapada en un tubo lesionada de gravedad y pereciendo por inmersión.
Hoy, cuando Celeste Ontiveros debería tener la edad de 8 años aproximadamente si se hubiera evitado la tragedia, la madre Carla Carmona, organizó una caravana, con la finalidad de exigir justicia y logren la clausura del parque acuático.
Decenas de vehículos, ataviados con globos de color rosado, algunos con la fotografía impresa de Celeste, circularon por las principales calles de la ciudad, con la finalidad de que puedan ser atendidos para que puedan contar con una resolución en el caso que, desde ocurrido el trágico deceso, sigue vigente.
Es de recordar que el 2020, dos años después del fatídico día para la familia Ontiveros, tras una serie de audiencias, un Juez ordenó el pago de indemnización como reparo del daño por la cantidad aproximada de 1 millón 300 mil pesos, pero los amparos por parte de los propietarios del balneario no han dejado llegar la justicia que esperan los familiares y allegados a la pequeña.
El parque fue clausurado por otro suceso, pero vuelve a entrar en funciones
Un año después del lamentable fallecimiento de Celeste, otra familia pudo haber sufrido la misma dolencia, pues una menor fue succionada por el mismo tubo en el que Celeste quedó atorada.
Fue una menor de seis años que el 17 de julio del año 2019 casi pierde la vida por la misma situación, sin embargo, fue rescatada por una persona que con dificultad pudo salvar a la menor que casi tuvo la misma suerte que Celeste.
En ese momento, el personal de Protección Civil de Allende en coordinación con P.C. del Estado, clausuró el local, debido a la revisión que se realizó dada la situación.
Pero como en el caso de Celeste, el balneario abrió las puertas al público nuevamente, luego de que sus propietarios lograran ampararse, quedando la incertidumbre, de que el desperfecto asesino haya sido arreglado o no.
