Admirable y cautivadora es la Catedral de Guadalupe en Parral, de un diseño único y de arquitectura románica verdaderamente impresionante. Desde el corazón de la ciudad atrae la mirada de los parralenses y visitantes, por sus dos torres de 50 metros de altura enmarcando la aparición de la Virgen de Guadalupe.
➡️ Únete al canal de WhatsApp de El Sol de Parral
Este bello y emblemático templo es sin dudas uno de los mayores atractivos del Turismo Religioso de la ciudad y su construcción data desde 1610 como una capilla particular de Francisco Montaño de la Cueva, dedicada a la Inmaculada Concepción.
A través del tiempo el edificio ha sufrido varias transformaciones, ya que en 1680 don Gustavo de Carbajal y Villamayor, lo adquirió por herencia y lo amplio para que el templo fuera más grande y ya dedicado a la Virgen de Guadalupe.
Fue hasta el año de 1902 cuando, Don Pedro Alvarado lo construyó como Santuario, pero debido a la inundación de 1944 la estructura se remojó y por seguridad el edificio comenzó a ser demolido el 1 de marzo de 1946, por lo que ya en 1959 bajo la supervisión del Párroco Don Agustín Pelayo Brambila, se reconstruyó el templo con la ayuda de fieles católicos de Chihuahua y Durango.
Fue así como en este nuevo templo y cuando aún no se terminaba de construir totalmente, se celebró la primera misa episcopal en el año de 1950, esto por cierto cuando todavía se celebraba la misa de espaldas al público, para finalmente ser consagrado el 12 de diciembre de 1959 por don Antonio Guisar Valencia.
En la actualidad la Catedral de Guadalupe alberga la sede de la Diócesis de Parral, desde el 4 de noviembre de 1992 siendo su primer obispo Don José Andrés Corral Arredondo, pero también es Santuario de la Virgen de Guadalupe.
Esta impresionante joya arquitectónica encierra una gran historia, ya que además de ser un lugar dedicado al culto y a la veneración de la Virgen de Guadalupe, también es un monumento emblemático con una rica historia.
Como ya se mencionó, la Catedral de Guadalupe es un templo de arquitectura románica con dos torres de 50 metros de altura, cada una enmarcado la aparición de la Virgen de Guadalupe y es verdaderamente impresionante.
Su interior lo es de igual forma, con arcos, pilares y columnas, revestidos con el humilde tepetate que representa cada uno de los niveles de la mina fundadora “La Prieta”, enmarcado por el bello mármol de carrara (color café) que adorna el santuario
Por su parte, el ábside del altar mayor es de mosaico italiano y plasma la histórica mañana del 12 de diciembre de 1531, cuando la Virgen de Guadalupe se le apareció a Juan Diego en el cerro del Tepeyac, así como las imágenes del obispo, Juan de Zumárraga, Juan Diego y el milagro de las flores.
El edificio también cuenta con una cúpula con 8 gajos, la basílica y rosas., una nave central y dos laterales, con su ábside de mosaico y comulgatorio, una capilla de San José y otra del Santísimo, con vitrales de la resurrección y la Sagrada Familia, la sede episcopal y el escudo de la Diócesis.
Por su parte, los vitrales lucen detalles como las apariciones de la virgen, la secuencia desde el descubrimiento de América por Cristóbal Colón, la conquista y colonización, la coronación de la Virgen de la Soledad, el descubrimiento de la mina “La Prieta”, fray Bartolomé de las Casas, la asunción de Pío XII, Colón ante los reyes y su muerte.
También, en bulto se encuentran imágenes de vírgenes y santos como Santa Teresita del Niño Jesús, Virgen del Carmen, San Antonio y San Judas, Virgen del Inmaculado Corazón, Virgen María Reina, un Nazareno, así como los cuatro evangelistas, Mateo (hombre alado), Marcos (león), Lucas (toro) y Juan (águila).
Arriba del coro en vitral, la cuarta aparición y a la entrada el escudo de Parral y escudos episcopales.
Por su majestuosidad y su rico patrimonio histórico, la Catedral de Guadalupe, es un destino imperdible para aquellos que visitan Parral, como un recordatorio de la fe y la perseverancia de generaciones pasadas y presentes.