Verdaderos testimonios de fe se vivieron el día de ayer con la celebración de El Señor de los Guerreros, un Cristo crucificado al cual la gente devota le atribuye cientos de milagros; personas agradecidas recorrieron descalzas el camino terroso en señal de penitencia, una de ellas es Guadalupe que junto con sus hermanas llegaron al templo, donde agradeció al señor el haber salido de la cárcel de un delito que no cometió y el haberse embarazado cuando no podía.
Las hermanas Hernández fueron uno de los muchos casos que recorrieron el camino de terracería descalzas, señalaron que llevan más de 15 años visitando a El Señor de los Guerreros todos en familia, el recorrer el camino terroso con los pies desnudos es una acción que la hacen con gusto, ya que siempre Dios los ha socorrido en casos críticos, señalan que mientras Dios lo permita continuarán con esta tradición, ya que es una forma de agradecerle los milagros recibidos.
Guadalupe una de las hermanas que recorrió descalza el camino a Las Ánimas, indicó que de los muchos favores ella recuerda dos son importantes, comentó que a ella y su esposo los acusaron de un robo que no cometieron y fueron encarcelados, gracias a la intervención de Cristo se pudo comprobar que no habían sido ellos y salieron del penal; sin embargo, duraron 18 días encerrados, esto pasó hace alrededor de un mes, como agradecimiento se propuso visitar El Señor de los Guerreros.
Así también otro de los milagros que recibió del Cristo, fue que quedó embarazada, ella no podía tener hijos, durante mucho tiempo ella y su esposo tenían la ilusión de tener un hijo; sin embargo, por mucho tiempo no tuvieron esa dicha, gracias a las oraciones y peticiones constantes al Señor de los Guerreros, un día recibió la noticia que estaba embarazada, lo cual no lo podía creer, comentó que ahora con más razón continuará visitándolo cada año.
La señora Teresa de la Cruz indicó que es mucha la fe que tiene hacia El Señor de los Guerreros, siempre pide por sus hijos y familiares cuando están en problemas, ella junto con su hija y sobrina recorrieron a pie el camino desde la colonia Héroes de la Revolución hasta el poblado de Las Ánimas, con gran devoción desde temprana hora se alistaron para llegar a agradecer al Cristo.
Indicó que llevan 20 años visitando al Señor de los Guerreros, siempre en grupo con la familia, unos se adelantan, otros se juntan ya llegando al pueblo, por lo general pasan la mayor parte del tiempo en el poblado, ahí comen y escuchan alguna de las misas ofrecidas, pero lo más importante se hincan ante el Cristo para dar las gracias recibidas a ella y a su familia.