El alcalde de Parral, César Peña Valles, se pronunció al respecto sobre el fraude de casi 2.5 millones de pesos que recibió la Administración en febrero del presente año, de lo cual dijo que en caso de existir algún involucrado interno deberán llevarse a cabo las responsabilidades correspondientes, pero también manifestó estar en colaboración con las autoridades de Fiscalía para verificar cómo es que ocurrieron los hechos. “Caerá quien tenga que caer”.
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El presidente municipal de Parral César Peña Valles, dio a conocer en entrevista sobre la total colaboración que tiene el ayuntamiento con las autoridades de la Fiscalía General del Estado conforme al tema del supuesto fraude de casi 2.5 millones de pesos.
En este sentido, destacó que en caso de haber algún involucrado al interior de la Presidencia Municipal, que haya actuado en favor de este acto ilícito, sabiendo que se trataba de un fraude, actuarán conforme a los protocolos que se indiquen.
“Caerá quien deba de caer”, así fue como lo mencionó el alcalde César Peña, quien además señaló que ya se dio parte a las instancias correspondientes para que estén enteradas sobre el proceso y los avances en la investigación.
En este sentido, informó que confía en que las autoridades den con el paradero de él o los presuntos responsables y se lleve a cabo el deslinde de responsabilidades correspondientes.
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Es de señalar que, de acuerdo a la Fiscalía General del Estado zona sur, fue en el mes de febrero que, personal de la Presidencia Municipal levantó un reporte ante dicha autoridad por el motivo de estafa.
Lo anterior, luego de que un día antes, personal del área de finanzas del municipio recibió diversas llamadas en el que se hacían pasar por personal de la Auditoría Superior de la Federación y solicitaban el pago de unos convenios de adhesión que se encontraban vencidos.
Asimismo, que, en otra llamada, al parecer de las mismas personas, se exigió el pago de diversos suministros, además de otra llamada en donde una persona se hizo pasar por la Tesorera Municipal para autorizar los pagos por dichos rubros, lo que derivó en una afectación a las arcas municipales por 2 millones 485 mil 210 pesos.