Más de 30 abuelitos llevan su vida tranquila en el asilo de ancianos "San Vicente", en donde reciben alimentos, hospedaje y atención médica para su bienestar. Blanca Rodríguez, misionera encargada del lugar, informó que existen enfermedades entre las personas que radican ahí, destacándose la demencia como el número uno entre los internos. Asimismo, declaró que los abuelitos son ingresados por decisión propia de los familiares, en donde ya no los pueden cuidar y prefieren llevarlos al asilo.
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Lidera la demencia senil como la principal enfermedad que tienen los internos del asilo, destacándose que una parte de ellos están bajo tratamiento para atenderlo. Asimismo, el insomnio, así como dolores musculares son los que se encuentran entre las tres principales enfermedades que se presentan en este espacio.
Por lo anterior, la entrevistada señaló que cada uno de los internos lleva un tratamiento especial de acuerdo a sus necesidades, pero que en general, todos participan en las terapias físicas que diariamente les ofrecen, con el propósito de tener una rutina sana.
Según reveló Blanca Estela Rodríguez, hermana de la Caridad en el asilo, son 34 adultos mayores son atendidos en todos los aspectos para cuidar de su salud, como brindándoles atención médica, alimentación y dormitorios dignos para una estancia más cómoda pese a las necesidades que existen.
Señaló que, como asilo, requieren del apoyo y la solidaridad de los parralenses para mantenerlo y brindar la atención a los adultos mayores, y para ello, hacen falta insumos para la cocina, como alimentos, carnes frías, frijol, azúcar y lo que se requiere para darles un plato de comida a los adultos en las horas establecidas; además, dijo que también necesitan productos de higiene personal, como desodorantes, jabón de baño, cepillo de dientes, peine, entre otros.
La entrevistada mencionó que los recursos son insuficientes para atenderlos, pero que, gracias a la voluntad de Dios, no se ha dejado de atender a nadie pues constantemente la población acude a realizar alguna donación de cualquier índole, por lo que refirió que hay comida para ofrecerles.
Por otra parte, dio a conocer que desafortunadamente el lugar está a punto de dejar de recibir a adultos mayores, pues destacó que solo tienen capacidad para atender a 40 personas, y prevén que durante este año llenen su totalidad, incluso, adelantaron que durante este mes dos personas más tendrán su ingreso.
La misionera señaló que hay familias quienes por cuestiones de cuidado o de tiempo, deciden ya no hacerse cargo de ellos y optan por ingresarlos al asilo, así también, dijo que hay quienes fueron encontrados en soledad en sus viviendas por vecinos o funcionarios públicos, por lo que fueron trasladados al asilo de ancianos.
Destacó que la convivencia y la armonía ha llegado a crear fuertes lazos de unión entre los internos, pues recordó que, durante esta Navidad pasada, una familia llegó por su abuelito y se lo llevó, sin embargo, a los días regresó porque el abuelito prefirió estar en el asilo que con ellos.