Parral, Chih.- Mediante un sondeo con 10 personas, padres de familia consideran que no son pedagogos para dar clases a sus hijos; se les dificulta dar explicaciones de los trabajos que dejan los profesores, hacen el intento de que no se atrasen en sus clases; sin embargo no se puede sustituir al maestro, debido al trabajo no les están dedicando el tiempo que requieren. Consideraron que se encuentran cansados a nueve meses de estar al frente de la educación de sus hijos.
Jesús Manuel Herrera, uno de los entrevistados, indicó que para él no ha sido batalloso el estar al frente de las clases de los niños; sin embargo, los resultados son menores ya que aprenden más con el maestro. Dijo que el padre de familia no es pedagogo, no se puede sustituir al profesor; sobre todo que con la pandemia hace falta el contacto personal entre maestro-alumno para que puedan aprender, no es solo el estar mandando trabajos por el celular.
Así también, indicó que por más que se esmeren los papás por enseñar a sus hijos, no es la misma atención que pueden tener con el maestro; además los infantes no ven a sus padres como maestros, en muchas de las ocasiones no hacen caso y pierden la obediencia.
Miguel Ángel Cano comentó que ellos por su parte les están dedicando tiempo a sus hijas que se encuentran en primaria, sobre todo por las mañanas, y en las tardes de dos a tres de la tarde se dedican hacer tareas, donde a su consideración son muchos los trabajos que les dejan los profesores, incluso dejan trabajos sin terminar ya que no les alcanza el tiempo para hacerlos todos..
Lorena Labrado explicó que han estado batallando mucho con sus hijos, ella tiene problemas para dar las explicaciones de las clases que requieren, en muchas ocasiones no tiene los conocimientos como para sacarlos de dudas, refirió que un padre de familia nunca va a sustituir a un maestro ya que ellos estudiaron y es una profesión que están ejerciendo.
Por su parte, Flor Cazares mencionó que para ellos, como padres de familia, ha sido muy complicado que los niños continúen teniendo las clases en casa, donde consideró que no están aprendiendo como debieran y se están atrasando, principalmente en matemáticas. Dijo que ella está al pendiente de que hagan las tareas y les está dedicando tiempo: sin embargo, no se compara con un maestro, ya que ellos tendrían mejores resultados si les dieran ya las clases en los salones.
Otra de las entrevistadas fue Nancy Arroyo, quien insinuó que ha sido complicado estar checando las tareas de los niños en casa, donde los profesores les están dejando muchos trabajos y tareas, ya se encuentran cansados estar al frente de los hijos durante nueve meses, debido a que trabajan los papas, refirió que no les están dedicando el tiempo suficiente para que no se atrasen con sus clases.
José Rodríguez contó que a ellos, como padres de familia, se les dificulta dar explicaciones de los trabajos que dejan los profesores, hacen el intento de que no se atrasen en sus clases; sin embargo, ahora con la pandemia en que no han asistido a las escuelas, no están aprendiendo igual que cuando tenían al maestro, ya que no se puede sustituir al profesor, así también debido al trabajo no les están dedicando el tiempo que requieren los niños.
Ana Hernández, por su parte, indicó que ha sido complicado que los profesores les explican a ellos y el padre de familia le explica el niño, haciéndose una triangulación en que después van surgiendo dudas, en que ni el niño ni el papá le entienden a las clases; incluso dijo que hay profesores que no están revisando los trabajos que hacen los alumnos, y si no revisan no se sabe si estuvieron mal o bien hechos.
Para Nicolás García, tiene que ver mucho que el maestro de manera personal les dé las explicaciones a los niños, para ellos se les ha dificultado dar las explicaciones a sus hijos, además les están encargando muchas tareas, lo cual los satura de trabajos y hacen que no les dé tiempo de terminarlos como debe ser; en su casa su esposa dejó de trabajar para solo atender a los niños ya que se estaban retrasando mucho.
