Ponen sus propias reglas y limitan el número de personas a la funeraria. En tanto, los servicios religiosos sólo permiten acceso a los más allegados.

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Las aglomeraciones en puntos concurridos son más propensos a un contagio del nuevo virus Covid-19. Encargados de empresas fúnebres han optado por tomar sus propias medidas de prevención a falta de indicaciones por parte del Sector Salud.

Según dio a conocer Fidel Márquez, encargado de la funeraria San Felipe, ubicada a un costado de la escuela secundaria federal “Rogerio Aranda”, agregó que, hasta el momento, ni Coespris, ni ninguna otra dependencia del Gobierno encargado del Sector Salud les han emitido las medidas de prevención que deben tomar para evitar las multitudes en los velorios.

Por esto, decidió buscar recomendaciones en funerarias de otras ciudades; incluso, países que se encuentran en fase 2 de Coronavirus para tomar sus propias medidas de prevención al contagio de esta nueva enfermedad, como es no permitir la entrada al velorio a más de diez personas, colocar gel anti bacterial en los accesos, negar el acceso a personas adulto mayor y niños – quienes son más vulnerables al contagio- y no pasar más de tres horas durante las misas de los difuntos.

Sin embargo, explicó que es difícil darles el señalamiento a los dolientes, ya que no tienen un documento oficial expedido por la Coespris para que acaten las “reglas temporales”, cuando se está llevando a cabo un velorio, por lo que muchos de ellos omiten el señalamiento.

Por su parte, Karla Cárdenas, encargada de funeraria Los Ángeles, indicó que para evitar las aglomeraciones dentro de las capillas, se optó por sólo dejar entrar a 10 familiares –los más allegados-.

Esto, según dijo, fue derivado de indicaciones que empezaron a tomar en otras funerarias, con el fin de reducir el riesgo de contagio; además mantener limpio el lugar, aunque no se haya llevado a cabo ningún servicio.

Para las misas, según indicó el padre Leonel Larios, no es diferente, pues dijo que las acciones que se están siguiendo para oficiarlas son las mismas que vienen en el comunicado expedido por el Episcopado Mexicano, el cual sólo permite celebrar la misa con los familiares más allegados al difunto, los cuales deben hacerse con los familiares consanguineos, además de guardar la distancia entre ellos.

Alejandro Sosa, vocera de la Secretaría de Gobierno, destacó que, como se indica en el acuerdo 049/2020, publicado en el Periódico Oficial del Estado el miércoles 25 de marzo, en el artículo segundo, señala que: “Se ordena la suspensión temporal de actividades en centros y salones de culto o espiritualidad, como templos e iglesias, así como cualquier centro de reunión de naturaleza similar”.

Empero, para las funerarias existe cierto grado de “omisión” a este acuerdo, ya que un funeral debe celebrarse tal como se lleva a cabo siempre, sólo que, por cuestiones de salud, deberá limitarse el acceso sólo a familiares, lo anterior con el fin de evitar aglomeraciones.

En tanto, Lucía Coronado, encargada de Funerales Cárdenas, destacó que desde que se enteraron de que nuestro estado se encontraba en fase 1 de la pandemia de Coronavirus, optaron por empezar a colocar letreros en los ventanales, en donde se indicaba a las personas que no más de 20 podrían tener acceso.

Aunado, colocaron gel anti bacterial en las entradas de las capillas, realizan la limpieza cada vez que termina un funeral y evitan las aglomeraciones afuera de la funeraria.

En la mayoría de los funerales las personas que asisten y no entran al velorio se reúnen afuera de las funeraria, lo que hace más propenso el riesgo de contagio.

Agregó Lucía Coronado que, cuando ocurren este tipo de acciones, los trabajadores salen a hacerles el señalamiento; la mayoría termina por omitir las indicaciones y al no haber respaldo por parte del Sector Salud, sólo les queda “tomar el toro por los cuernos”, o dejarlos hacer lo que quieran.

El licenciado Sosa destacó que es importante recordarle a la gente que debe evitar crear aglomeraciones, recomendó a los propietarios y trabajadores de funerarias, que en cuanto soliciten el servicio, extiendan la invitación a que sólo los familiares más allegados.

El licenciado Adolfo Blanco, encargado de Funerales Loya, discordó en cuanto a las opiniones de las demás encargados, puesto que dijo que no puede obligar a los familiares del difunto a abandonar el lugar, por lo que optó por sólo seguir otras medidas de seguridad.

Son mantener una estricta limpieza antes y después de los funerales, cuando no están siendo utilizadas; sin embargo, concordó con los demás encargados, en que ninguna dependencia de Gobierno Estatal ha emitido recomendaciones.

No obstante, no pueden esperar a que brinden los métodos preventivos hasta que ellos quieran, ya que las funerarias a veces tienen clientes a diario y preocupados por la salud, tanto de los dolientes como de trabajadores, no pueden esperar a las decisiones del gobierno teniendo que recurrir a la opinión de otras funerarias locales como foráneas para crear sus propias medidas de prevención.

En cuanto a los embalsamadores, destacó que desde siempre se han implementado las medidas de prevención ante enfermedades de alto riesgo, como VIH y hepatitis. Por lo que a su parecer el coronavirus no es diferente.

Por medio de colegas de otros países donde la pandemia ha cobrado la vida de cientos, obtuvo medidas de prevención en el trato a los cuerpos, corroborando que no es diferente a difuntos que perecieron por otras enfermedades.

El presbítero Leonel Larios dijo que, en cuanto a los horarios de misas, siguen siendo los que elijan los familiares, siempre y cuando – reafirmó-, no exceda de 50 personas.

Se sigue a la espera de que el Obispo emita indicaciones más específicas sobre cómo seguir llevando a cabo las medidas preventivas.

Con colaboración de Rosy Reyes | El Sol de Parral