En el marco de la misa Binacional ofrecida por el descanso de los migrantes muertos, el obispo de El Paso, Markk Seitz, pidió perdón como ciudadano norteamericano por todas las injusticias cometidas en contra de los migrantes.
La ceremonia se llevó a cabo a un costado de la valla fronteriza en el sitio conocido como "El Punto" concelebrando el obispo de la diócesis de Juárez, Jose Guadalupe Torres Juárez , y los obispos de El Paso, Las Cruces y el estado de Iowa.
En esta ocasión los obispos rogaron por las almas de los migrantes que han fallecido en su intento por llegar a los Estados Unidos además de pedir al creador por todos aquellos que han sido víctimas de homicidio, trata y secuestro, destacando el padre Javier Calvillo de la Casa del Migrante los 3800 migrantes que han sido secuestrados en todo el estado y de ellos 2200 solo en ciudad Juárez.
"Sin datos periodísticos de los últimos 5 meses y algunos datos que me pasó un conocido de la fiscalía", refirió el sacerdote en torno a los migrantes secuestrados al ser entrevistado al final del evento.
Al evento acudieron cerca de 200 migrantes originarios de diferentes países de centro y sud América así como representantes de varíos colectivos que apoyan a los migrantes en su paso por está frontera.