Presas de la región en niveles críticos

San Gabriel está al 32.9% de su capacidad y Pico de Águila al 30.52, siendo las que sirven para el riego del Distrito Jiménez

Abraham Zamarrón | El Sol de Parral

  · jueves 18 de junio de 2020

Foto: Archivo | El Sol de Parral

Crítico el nivel de las presas de la región, San Gabriel se encuentra al 32.9 por ciento de su capacidad, mientras que Pico de Águila al 30.52 por ciento. De no presentarse precipitaciones este año, el panorama agrícola se avizora de los más adversos. No obstante se tiene la esperanza de que las lluvias se hagan presentes en la región y en las zonas donde se generan los escurrimientos para los cuerpos acuáticos.

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El titular de la Secretaría de Agricultura en el Distrito de Jiménez, ingeniero Roberto Arturo Baca Perea, informó sobre el estado que guardan las presas de la región, las cuales se encuentran en niveles críticos.

En este sentido, Baca Perea indicó que las presas que abastecen a esta región, son las que se encuentran a niveles más bajos en comparación con los cuerpos acuáticos de otras partes de la entidad.

En el caso de la presa San Gabriel, cuya capacidad total es de 80.98 millones de metros cúbicos, al momento se encuentra a un 32.9 por ciento. Mientras que la presa Pico de Águila, con capacidad para 14.93 millones de metros cúbicos, se encuentra al 30.52 por ciento.

En cambio presas como La Boquilla y La Madero, se encuentran a un 46.73 y 71.41 por ciento, respectivamente, niveles muy superiores a los de las presas que sirven para el riego del Distrito de Jiménez.

En tanto, comentó que si para agosto no llegan las lluvias el panorama será de los más adversos, ya que se viene arrastrando una sequía desde hace tres años. Incluso la situación obligó a reducir la superficie de siembra de 5 mil a sólo 3 mil 200 hectáreas.

Ello sin contar el golpe económico que impacta a la ganadería por falta de pastizales, que en contraparte, ha venido beneficiando a los productores agrícolas que le han apostado al cultivo de pasturas y forrajes.

Sin embargo precisó que continúa la esperanza de que sea un buen año, “el año pasado veíamos muy negro el panorama pero empezó a llover en octubre y noviembre, aún no podemos cantar derrota, por lo regular las precipitaciones son a partir de la mitad de julio”, puntualizó el entrevistado.

Finalmente, Baca Perea agregó que hay buenos pronósticos tan solo con la proyección de que existen entre 16 y 17 huracanes provenientes del pacífico. “Además, los señores grandes dicen que cuando hay mucho mezquite era un año muy llovedor, ahorita hay mucho mezquite, ojala sea el preámbulo de un buen temporal lluvioso”, concluyó.