De acuerdo a información de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, expresa que fue el día 30 de marzo del 2017, cuando fueron identificadas dos osamentas de personas del sexo masculino, en la localidad del municipio de Jiménez conocida como los Arenales, los cuales se encontraban en calidad de desaparecidos desde el año del 2015.
Tras el hallazgo de las osamentas la Fiscalía General del Estado llevó a cabo diversos estudios y análisis realizados por especialistas en antropología, genética y medicina forense, lo que permitió establecer que los restos localizados corresponden a dos personas del sexo masculino, ambos hermanos de nombre Moisés Zaín D. S. y Javier Adrián D. S., quienes contaban con 25 y 32 años de edad.
Así mismo, los restos habían sido inhumados en 2019 a través del Sistema de Ingreso y Egreso de Cadáveres (SIEC) de la Fiscalía General del Estado, luego de permanecer dos años sin ser identificados.
Fue hasta el pasado mes de mayo del 2022, que el perfil genético de los restos arrojó coincidencia con muestras genéticas aportadas por personas con familiares reportados como ausentes, logrando determinar el vínculo genético.
"Asimismo, se realizaron pruebas científicas y estudios interdisciplinarios que permitieron establecer la identidad particular de los restos, así como determinar que la causa de muerte de uno de ellos, fue por una herida por proyectil de arma de fuego", de acuerdo a información de la FGE.
Una vez realizados los protocolos correspondientes se hizo la entrega de los restos a sus familiares.
Cabe destacar que, durante el miércoles 17 de agosto, trascendió de la localización de los dos hermanos desparecidos en el año del 2015; cuya localización de las osamentas, fue realizada en el año del 2017, por la FGE e identificados con un vínculo genético apenas en el mes de mayo del 2022.
Por otra parte, a través de redes sociales, familiares y amigos dieron el último adiós a los dos hermanos que permanecieron desaparecidos por siete años.