Mañana cumplen una semana los militares custodiando un inmueble y la orden de cateo necesaria para que el Ministerio Público realice la inspección no llega.
Día y noche, elementos castrenses han permanecido a la intemperie soportando el temporal, sin acceso a un sanitario y turnándose para poder acudir a darse un baño.
El sábado se informó que el viernes, elementos de la Sedena habían hecho el aseguramiento de una finca ubicada la altura del kilómetro 1.3 de la carretera que conduce de Ciudad Jiménez al Ojo de Dolores.
Trascendía que en dicho lugar había al menos tres vehículos con reporte de robo, por lo que se creía que pudiera haber más ilícitos.
Sin embargo, los elementos castrenses estaban a la espera de una orden de cateo y del agente del Ministerio Público para que la revisión fuera apegada a derecho.
Mañana se cumple una semana de que los activos militares permanecen resguardando el inmueble, a la espera de que un Juez liberara la orden de cateo y autorizara al Ministerio Público para la revisión.
La lentitud en el proceso ha obligado a los soldados permanecer en el lugar, vigilar y pernoctar a la intemperie en tendidos improvisados, para despertar y soportar el ardiente sol de la Vieja Huejoquilla o la lluvia cuando llega a registrarse. Esto, mientras visten sus pesados uniformes compuestos de varias prendas que poco permiten refrescar.
Si bien, los soldados no lo dicen, es evidente la rudimentaria estrategia que se han visto obligados a implementar ante el lento proceso de girar una orden de cateo, lo que hace que para ir al baño, en lugar de un sanitario, vayan detrás de “la lomita” o los arbustos.
Una ducha ni pensarlo; empero, sean tomado medidas como acudir en turnos para poder darse un baño y cambiarse de ropas, no dejar sólo el lugar del aseguramiento en el intento.
En un inicio se pensaba que el atraso en la liberación de la orden de cateo se debía a que se había atravesado el fin de semana; pero el supuesto no se justificó, ya que siempre hay personal de guardia en las diferentes instancias de justicia.
Además, hoy a casi una semana, los militares continúan a la espera del trámite que los obliga a operar en la austeridad y rusticidad, sólo para garantizar que sus acciones sean apegadas a derecho y al marco legal.