Tras las negociaciones para enviar agua de la presa la boquilla en Camargo, a los Estados de Tamaulipas y Nuevo León, la federación dejó el diálogo de lado y ha empleado el apoyo de la fuerza pública.
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Desde la tarde noche de este lunes, al menos una veintena de elementos de la guardia nacional arribaron a la presa la boquilla al parecer como parte de sus rondines de rutina y con la intensión de quedarse a acampar en el lugar, sin embargo el encargado del lugar no se los permitió a falta de una orden.
Hoy al filo del mediodía corrió como reguero de pólvora la noticia de que la guardia nacional había arribado en apoyo a la CONAGUA para abrir las compuertas de la presa y desfogar cerca de mil millones de metros cúbicos de vital líquido.
Al momento ya una treintena de elementos de la guardia nacional se encuentran en el lugar para dar paso a la apertura de válvulas y compuertas por parte de la comisión nacional del agua y llevarse el recurso hídrico a las entidades antes mencionadas.
Varios productores han arribado a la escena para tratar de impedir el saqueo del agua, ya que la pérdida de ese volumen compromete la agricultura en prácticamente todo el distrito de riego. Califican como un acto intimidatorio la presencia de los elementos castrenses.
Y es que prevén que ante la situación que se vive en el lugar, esta pudiera tornarse álgida y desatar algún conflicto o contingencia.
Diputados locales como Jesús Velazquez y Luis Aguilar, se dirigen hacia la presa a fin de intervenir e impedir que el agua sea extraída y llevada a otros lugares sin medir el impacto que traería a los productores de Camargo y su región.
