En términos generales empresarios locales consideran positivos los resultados obtenidos en el “home office”, trabajo realizado por parte de su personal desde casa, en el marco de las medidas de emergencia establecidas para prevenir el contagio de Covid-19, por lo que no se descarta que este sistema continúa con su aplicación en el futuro.
Aparte de permitir el establecimiento de una sana distancia, porque parte del personal no trabaja directamente en las oficinas, esto ha permitido a algunas empresas reducir sus gatos en materia de servicios y otros que se generan regularmente, coincidieron.
Guillermo Soria Magaña, de la empresa Conafi dedicada a la venta e instalación de soluciones computacionales, dijo que la pandemia del Covid-19 originó que los propietarios de diferentes tipos de negocios, se vieran obligadas a buscar la manera de mantener sus actividades aunque fuera de manera parcial.
Esto determinó que al tener que cerrar sus establecimientos, mucho del trabajo continuara realizándose en casa, con buenos resultados algunos de ellos.
Señaló que entre las ventajas que se observaron y que van a servir para que algunas compañías continúen en parte con este sistema, se encuentran lo ahorro en servicios, en algunos casos del pago de renta de grandes locales y, además, el cuidado de la salud de su personal.
Desde luego, señaló, hay empresas que por su forma de operar tienen que contar con trabajadores en las áreas y líneas de trabajo, sobre todo en la cuestión manufacturera, en la que el trabajo no se puede llevar a casa, pero existen otras en las que no representa mayor problema.
Añadió que en empresas que manejan información sumamente confidencial, se implementaron sistemas que permitieron tener un mayor control sobre sus datos.
Comentó que en su empresa parte del trabajo ya se había realizado anteriormente en “home Office”.
Por su parte Rafael Martínez, gerente general de la agencia de autos Alden Juárez, que comercializa los vehículos de la marca Lincoln, Kia y Ford, dijo que en su agencia desde el inicio se utilizó el sistema de trabajo en casa, con el contacto directo de sus vendedores con posibles clientes y, en ocasiones, el traslado de las unidades hasta donde se haya acordado con cliente para llevar a cabo la demostración o entregar la unidad.
La única área que no se pudo manejar de esta manera fue la del taller, por los trabajos de mantenimiento que cada determinado tiempo se tienen que realizar a las unidades vendidas, así como a otros servicios que demandan sus clientes.
Sin embargo, no todo fue igual, en el caso de la concesionaria Saracho, que comercializa los vehículos GM y Chevrolet, su gerente Ramón Trejo Torres, consideró que esta es una opción, pero para su compañía fue más funcional rotar a sus grupos de vendedores, con un coordinador para que atendieran a los clientes, aunque fuera vía telefónica y a través de citas previas.
Señaló que desde el inicio de la emergencia sanitaria la agencia cerró sus puertas y solo determinados días de la semana había un par de empleados de guardia.
Esto provocó que las ventas no se dieran como se esperaba, aún dentro de la crisis, por o que se tuvo que cambiar de estrategia, con mejores resultados señaló.
Otros negocios como DMI, que encabeza Alfredo Vilagrana, han utilizado con éxito el "home office" pero solo para ciertas áreas de la compañía que se dedica a la manufactura avanzada.
Parte del personal que trabaja desde su casa, es del considerado como vulnerable, como quienes tienen diabetes o padecen de alta presión, comentó.
Quienes trabajan directamente en el ensamble del equipo y la maquinaria tienen que hacerlo directamente en el negocio o en las instalaciones de los clientes, por lo que se requiere su presencia.
Eduardo Ramos Morán, empresario propietario de la empresa Aduana Soft especializada en la venta e instalación de softwere y equipo relacionado con la cuestión aduanal, además de presidir la Confederación Patronal de la República Mexicana, consideró que el trabajo desde casa se presenta como un sistema novedoso, aunque muchas compañías hace tiempo que lo utilizan.
Destacó que esto se observa más a nivel internacional, debido a que la idea que tienen muchos patrones en México es que el empleado debe estar a la vista para comprobar que cumple con su trabajo.
Hay controles que pueden establecerse para que cada quien cumpla con lo que le corresponde y eso se ha visto ya en la práctica durante los meses en los que la mayoría de las empresas han tenido que mantenerse cerradas, recalcó.
Consideró que esta es una práctica que en el corto, mediano y largo plazo se va a ver más en algunas compañías en las que ha funcionado, aunque habrá quienes prefieren la forma tradicional de trabajar.