¡Parecía un Tsunami! Testimonios que a 11 años de la trágica inundación, hoy recordamos los estragos que dejó aquella fatídica noche en la que Parral sufrió una de las catástrofes más devastadoras.
Aquella noche de agosto de 2008 se suscitó una de las catástrofes más notorias en la historia de Parral, la intensa caída de lluvia que duro alrededor de 5 horas, suficiente para que nuestra ciudad, se viera envuelta en lo que sería la segunda inundación en la historiade la ciudad.
Fue durante la noche del 30 de agosto del 2008, cuando se empezó a registrar una intensa lluvia en toda la ciudad. En tan solo unos minutos gran parte de Parral, comenzó a verse inundada, principiando en el Rio Parral, el cual cubrió en su totalidad la Vialidad del Rio.
Sobre la calle Molino del Rey, en aquel entonces, una empleada de Jasahos Pizza, platicó como fue que la fuerza con que se venía el agua parecía un Tsunami.
Mencionó como una gran ola se levantó derivado de la velocidad y fuerza con la que el cauce tomaba todo a su paso, golpeando de manera impresionante la finca.
“quedamos atrapadas. No nos podíamos acercar a los barrotes porque estaban electrificados”, comentó al narrar como el agua alcanzó las instalaciones eléctricas, aumentando el temor en los seis empleados que por al menos una hora quedaron atrapados dentro de las instalaciones del establecimiento.
En ese momento, la entrevista con Jesús Aguirre, propietario del comercio, comentó que durante aquella noche, después de enterarse de lo sucedido, se sorprendió al ver como el agua casi cubría la camioneta en la que circulaba.
Señaló, que el agua destruyo uno de los vehículos de servicio del negocio, el cual fue arrastrado partiéndolo por la mitad quedando inservible.
Otro de los testimonios de un cliente que se encontraba en ese lugar al momento de la inundación, narra cómo quedó atrapado mientras compraba una pizza para llevar. Se alteró emocionalmente debido a que su familia lo esperaba afuera, viviendo así, momentos entre la incertidumbre y el pánico.
Mientras tanto en el sector Praderas, las lágrimas en el rostro de una mujer, se perdían ante la intensa lluvia, que golpeaba sus caras, quien, entre sollozos, murmuraba “pobrecito de mi hijo, perdió su casa”, al ver como el domicilio había sido afectado por la caída del muro.
Uno de los argumentos recabados por esta casa editora de esa fecha, relata, como una de las afectadas, narró que al principio empezó a escuchar como las piedras caían sobre el techo. “Creí que me iba a morir junto con mis hijos”. Aseveró.
Dijo, que al principio no le dio importancia; sin embargo, los golpeteos se fueron intensificando y al asomarse por la ventana, se dio cuenta que la casa se estaba destruyendo, por lo que corrió a donde estaban sus dos hijos, tomándolos de las manos.
“Viví los instantes más feos de mi vida, no sé cuánto tiempo paso, pero a mí se me hizo eterno. Creí que nunca iba a abrir la puerta”. Dijo la mujer, quien se llevó una fuerte impresión al ingresar a la casa después de varias horas del trágico suceso, observando, como una roca agujeró el tanque de gas, dejando escapar el combustible; aunado a la destrucción de la mayoría de sus bienes.
Pasando al sector de Las Fuentes, otro testimonio de los afectados, indicó como su vivienda había sido inundada alcanzando hasta metro y medio de profundidad.
Los muebles que adornaban la residencia tuvieron que ser retirados poco a poco, pero las lágrimas en su rostro no cesaban…
Una camioneta tipo pick up color rojo, fue a parar al patio trasero de la casa, quedando sepultada entre escombros de madera y hierba, junto a una “traila”; siendo ambas retiradas con una grúa tras dos horas de labores.
Cabe señalar, que en aquel entonces, se volvió difícil transitar por las calles lodosas, que complicaban aún más las labores de los voluntarios y trabajadores del Municipio y de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), quienes laboraron de manera conjunta para retirar los excesos de agua y escombro.
Ofrece el Alcalde tomar las medidas necesarias del Caso
Lo anterior, debido a que seguían apareciendo afectaciones, tanto en colonias populares, como en sectores residenciales.
El Presidente Municipal de aquel tiempo, licenciado Oscar González Luna (2007 – 2010), lamentaba los hechos y dijo que buscaría los recursos estatales a fin de reconstruir las partes afectadas y que ayudarán a los damnificados.
Sin embargo, durante el recorrido por las zonas más afectadas, la gente lo abordaba reclamándole porque no había puesto atención al cauce del rio, el cual se encontraba estrecho debido a las fincas.
Asimismo, se le hizo saber, que es importante que pusiera atención a la situación; ya que era muy lamentable que tuvieran que pagar las pérdidas materiales.
A estos reclamos, el presidente dijo que se tomarían las medidas necesarias, agradeciendo alos ciudadanos el haberle manifestado sus inquietudes.
Ese día, distintos puntos de la ciudad se pudieron contabilizar más de 50 familias que sacaban de las viviendas sus muebles y demás bienes, debido a que el agua que ingreso a los hogares, superó el metro y medio de altura.
Paredes caídas, ventanas rotas, lodo y mucha agua, se podía visualizar. Los inmuebles totalmente inhabitables, personas desesperadas buscando refugio entre sus familiares al no poder habitar ya sus hogares de los sectores Las Fuentes primera etapa, Praderas, Del Parque y del Centro principalmente.
Cabe recordar que fue hasta alrededor de las 9 de la mañana del día 31 de Agosto, que el nivel del agua comenzó a ceder y la precipitación disminuyó; sin embargo, Protección Civil activó la alerta Naranja debido a la tendencia ascendiente de los niveles de arroyos y del propio rio, además de la persistencia de las lluvias.