La Fiscalía General del Estado Zona Sur comenzará con operativos para la detección de tala clandestina en el municipio de Guachochi, por lo que se efectuarán revisiones en aserraderos, ejidos para la verificación de permisos e identificación de vendedores y compradores.
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Dentro de las acciones y estrategias para la erradicación de delitos en el municipio de Guachicho, el Fiscal de Distrito Zona Sur, Juan Carlos Portillo Coronado, manifestó que comenzarán a llevar a cabo una serie de operativos.
Explicó que estas acciones serán efectuadas en los diferentes aserraderos y ejidos para verificar permisos de aprovechamiento y conocer a detalle quienes son los compradores y vendedores de madera.
“Estaremos desarrollando estos operativos dentro de las acciones encaminadas al municipio de Guachochi, en donde se han presentado diversos hechos delictivos”.
Destacó que estos ejercicios estarán coordinados con las autoridades de los diferentes niveles de gobierno, con el objetivo de identificar si el crimen organizado esta inmiscuido en la tala clandestina o venta de madera.
Es de recordar que el pasado 25 de marzo se informó sobre la detención del presunto líder criminal Reyes C. de la fracción de “Los Reyes”, quien supuestamente se encuentra en disputa constante por el control de la tala clandestina en Guachochi contra un grupo dirigido por Melquiades D. alias "El Chapo Calin" o "El 13".
Fue tras un operativo por parte de las autoridades que conforman el “Operativo Conjunto Guachochi” cuando se percataron de una camioneta de la marca Chevrolet tahoe que circulaba a exceso de velocidad.
Al marcarle el alto al conductor, este emprendió la huida, generando una intensa movilización policiaca, sin embargo, fue alcanzado en la calle Norogachi, en donde se descubrió que se trataba del presunto líder criminal Reyes C.G. de 40 años, quien iba en compañía de una mujer identificada como Brenda Cruz L. y una menor de edad.
En la unidad fue localizada un arma larga , conocidas como “cuernos de chivo” con un cargador de disco abastecido y un arma 7.62 X 39 milímetros, un radio de comunicación y diversos equipos tácticos.
Además de dos bolsas de plástico que en su interior contenía polvo blanco y fino con las características similares de la cocaína con un peso de 60 gramos.
