CHIHUAHUA. Chih., (OEM-Informex).-- Rubén Montoya Domínguez, hermano del piloto fallecido en el accidente en Guachochi, perdió la vida ayer por la tarde en las inmediaciones de la Clínica del Parque, donde no soportó la intervención médica, por lo cual fue dado por muerto ante las afectaciones que había sufrido a consecuencia de un derrame cerebral.

Todo ocurrió hace más de cinco días, cuando Octavio Montoya Domínguez, de 41 años y su hijo Jorge Montoya Leo, de 9 años, se accidentaron en una avioneta Cessna en la comunidad de La Mesa del Barro, en el municipio de Guachochi, donde resultaron con quemaduras de casi el 60% de su cuerpo y varias lesiones de consideración.

Ante esta noticia que fue difundida en varios medios de comunicación y tras la llegada al Hospital General de Chihuahua, el hermano, Rubén Montoya, sufrió una trombosis de la impresión de recibir la noticia de que su hermano y sobrino se habían accidentado en una avioneta que se desplomó en aquella comunidad.

Rubén cayó desvanecido al conocer de la noticia, por lo cual fue hospitalizado de la misma manera, ya que había sufrido un derrame cerebral de la impresión, por lo que permaneció inconsciente en una cama de hospital, hasta la tarde de ayer cuando lo dieron por muerto al perder los signos vitales.

Mientras Octavio y su hijo Jorge intentaban aferrarse a la vida, Rubén en otra cama de hospital se mantenía estable, siendo los más afectados el padre e hijo, quienes tenían quemaduras de tercer nivel y algunos daños internos, generados por la caída de la avioneta y el fuerte impacto contra el terreno.

Hace cuatro días y tras el intento de salvaguardar su vida, el menor de 9 años murió en la cama de un hospital, aun y cuando el Gobierno del Estado pretendía mandarlo a los Estados Unidos para que fuera atendido por la Unidad de Quemados, ya que era el más afectado de este fatal accidente y requería de atención personalizada.

Sin embargo, pese a los esfuerzos, Jorge fue dado por muerto el domingo, mientras que su padre se debatía entre la vida y la muerte, pero horas más tarde dejó de existir al igual que su hijo; fue dado por muerto en las instalaciones del hospital, donde los médicos no lograron hacer algo para mantenerlo con vida.

Tres días después de que fuera declarado sin vida Octavio Montoya, en las instalaciones de la Clínica del Parque, Rubén Montoya falleció a consecuencia de la trombosis que había sufrido hace más de una semana a consecuencia de la impresión de conocer que su hermano y sobrino estaban en peligro de morir.

Sólo el pasado miércoles, familiares y amigos de Rubén seguían esperanzados en conseguir donaciones de sangres, a fin de que pudiera ser intervenido, sin embargo, un día después Rubén fue declarado muerto, lo que generó la pérdida de dos adultos y un menor el accidente aéreo en Guachochi.

A través de las redes sociales, los amigos y familiares comenzaron a dar muestras de afecto y de pésame, al conocer la lamentable noticia, ya que tres familiares habían perdido la vida a consecuencia de un accidente aéreo, donde todos intentaron por varios días continuar con vida en diferentes salas de hospital.