“Imposible dar regalos de Navidad a nuestras niñas debido a que el sueldo de mi marido es insuficiente para cubrir los gastos del hogar y hacer compras extra”. Así lo mencionó una madre de familia que debido a las carencias con las que viven, en la temporada navideña se dificulta darles un regalo. Por lo que, en ocasiones, han tenido que acudir a los eventos donde se rifan con la esperanza de que obtengan un obsequio.
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A causa de las carencias que sufren, para la familia Lazos Ramos le es difícil comprar un regalo de Navidad para sus cuatro pequeñas, lo que en ocasiones les remuerde el corazón y la conciencia, pues quisieran como cualquier otro padre de familia, darles un obsequio.
Indicó la madre de las cuatro, Estela Ramos, cada año siempre asisten a las obras caritativas que el Municipio realiza, con el fin de que no se queden sin su regalo, ya que ellos no pueden proveerse, siendo que este año no será diferente.
Asimismo, indicó que por los gastos corrientes de luz y agua que “ya tocan este mes” tal vez sean suficientes para que no les alcance para hacer, aunque sea una pequeña cena; no obstante, los regalos una vez más no estarán bajo el pino navideño de la casa.
La sopa o el pan, acompañarán a la familia que, si bien, para muchos es poco, para ellos es más que una bendición. “Tener con qué alimentar a las pequeñas nos brinda la seguridad de que todo estará bien.”
Hace muchos años que a ninguna de ellas podemos comprarle un regalo de Navidad; siempre andamos a las carreras yendo y viniendo a los eventos donde regalan juguetes para que de perdido no se queden sin estrenar algo nuevo. A nosotros nos es insuficiente mantenernos con el sueldo de mi esposo, pero como quiera, salimos adelante
dijo la madre.
Bicicletas, tablets y colorimetría son el sueño de estas cuatro hermanas, que a parte de la sangre, comparten el deseo de recibir un regalo esta Navidad. Pese a las carencias con las que viven a diario, las cuatro pequeñas utilizan su tiempo para dar buena cara al tiempo.
Las hermanas Fany, Fabiola, Dulce y Maylen, de 3, 6, 9 y 11 años de edad, son cuatro niñas que, como cada año, en esta época de dar y recibir esperan obtener un regalo de Santa Claus.
La más pequeña de todas, Fany, con alegría y gozo espera que Papá Noel le cumpla su sueño de recibir una bicicleta con la cual divertirse, la que tiene actualmente es muy pequeña y ya no hace la misma funcionalidad que antes.
Este mismo sueño lo comparte su hermana Dulce, quien dijo que también espera una bicicleta esta Navidad, para salir a pasear junto a su hermana e ir a la tienda y a todos lados.
Por su parte, Fabiola, está un poco más en la tecnología, pues su sueño es tener una tablet con la cual poder descargarle juegos y así divertirse; además podría utilizarla para sus clases y ver videos de la música que tanto le gusta.