Empleados del hospital de Guadalupe y Calvo, perteneciente a la Secretaría de Salud del estado, realizaron una manifestación pacífica y cerraron las oficinas gubernamentales, solicitando apoyos para el personal, lo anterior, ya que requieren medicamento básico y renovación de las instalaciones, por lo que manifiestan que este paro será levantado, en cuanto hablen con la autoridad de salud en el estado.
Ayer empleados del Hospital de Guadalupe y Calvo, realizaron una protesta pacífica y cerraron las oficinas gubernamentales, luego de manifestar que no cuentan con medicinas que son básicas para el tratamiento, además de que piden una renovación del hospital.
Los trabajadores quienes prefirieron estar en el anonimato, por temor a represalias, manifestaron “estamos abandonados”, por lo que decidieron llevar a cabo esa manifestación.
Indicaron que a partir de ayer se cerró la puerta en lo que compete a las oficinas de gobierno y hasta que autoridades de salud dialoguen con ellos, y les den solución.
Asimismo, dijeron que urgencias no se cierra, pero si el área administrativa y dirección, lo que se denomina cuerpo de gobierno y consulta externa.
Expresaron que no tienen viáticos para las capacitaciones que se otorgan, no hay medicamento básico como para el dolor, insulina, soluciones para poner suero, entre otros; además de que se han quitado especialistas como cirujanos anestesiólogos, desde hace cuatro años y no se han restablecido.
Una de las peticiones, es que se subsane el hospital en infraestructura, en lo que se refiere a personal e insumos, por lo que seguirán así hasta tener comunicación con la Secretaría de Salud de Chihuahua.
Cabe citar que son en total alrededor de 150 trabajadores los que laboran en este nosocomio.