DELICIAS.- Gerardo Ochoa Granados, párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, anunció que este año se suspenderán las peregrinaciones que tradicionalmente se realizaban en honor a la virgen; al mismo tiempo, exhortó a los creyentes católicos a no perder la esperanza en este próximo Adviento, pese a los tiempos difíciles y que afligen a la mayoría.
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El padre Gerardo Ochoa explicó que en atención a las recomendaciones y medidas dictadas por el gobierno estatal, la parroquia tomó la decisión de que el docenario de este 2020 será distinto, porque se invitará a las familias a vivirlo desde los hogares.
No habrá peregrinaciones ni kermés en este diciembre próximo, pero la misa se celebrará todos los días a puerta cerrada y se transmitirá por medio de la página de la parroquia en Facebook, por lo cual invitó a los feligreses a que sigan los servicios religiosos.
Se rezará el rosario todos los días a las 18:00 horas y terminando esta liturgia será celebrada la misa, precisó el párroco.
Como no habrá peregrinaciones, la parroquia se basará en el rol de éstas del año pasado. Cada día del docenario se ofrecerá la misa por las personas y negocios como si hubieran peregrinado, explicó el padre Ochoa Granados.
“Vamos a ofrecer la misa cada día, como si hubieran peregrinado”, reiteró el religioso, quien indicó que el docenario debe celebrarse con fe y ternura.
El sacerdote recordó que en las peregrinaciones de los años pasados los fieles, de manera voluntaria, donaban despensas, cobijas y otro tipo de ayudas, por lo cual los invitó a no dejar de hacerlo este año aunque no haya procesión.
Ochoa expuso que la parroquia tiene bastantes necesidades en este momento, porque al no celebrarse los servicios religiosos tampoco hay ingresos económicos, pero sí se presentan gastos. Los donativos y ofrendas –señaló- pueden hacerlos llegar a la oficina parroquial, que estará abierta hasta las 8:00 de la noche.
Afirmó que este Adviento cercano está marcado por la esperanza cristiana. Explicó que esta esperanza consiste disponer el corazón a celebrar no sólo el 25 de diciembre, sino a celebrar que Jesucristo vendrá, comparando a estos tiempos difíciles como losas pesadas que han intentado sofocar la fe de los creyentes.
Sin embargo, recordó que el Adviento es una oportunidad para levantar esas cargas duras, porque la venida de Cristo debe inundar de esperanza al pueblo católico.
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