DELICIAS. - La construcción de un acueducto desde el sureste del país hasta Chihuahua, para abastecerlo de agua, es la propuesta planteada por Manuel Márquez Campos, dirigente de Agrodinámica Nacional, para solucionar el problema de la sequía y como una forma de compensar a la entidad por el desfogue de las presas del año pasado.
Al hablar sobre la escasez de agua en el estado, Manuel Márquez aseveró que es factible una obra de ingeniería para transportar el líquido desde los ríos Usumacinta y Grijalva, que corren por los estados de Chiapas y Tabasco, hasta el norte de la república, donde el estrés hídrico es constante.
Márquez recordó que existen prodigios de la ingeniería los cuales permiten transportar volúmenes de agua desde sitios lejanos, como sucede en el estado norteamericano de California, cuyas ciudades son abastecidas por medio de un acueducto que recorre miles de kilómetros desde la presa Hoover, atravesando desiertos y montañas.
Incluso aquí en la región existe algo parecido, ya que una tubería permite llevar agua de la presa Rosetilla, enclavada en el municipio de Saucillo, a 500 kilómetros de distancia en la ciudad de Monclova, Coahuila.
Explicó que dicho tubo utiliza el agua para mandar lodos que contienen mineral de hierro, extraído de la mina de Hércules, hasta la planta siderúrgica de Altos Hornos de México, después de cruzar por serranías.
Otro ejemplo de que sí es posible construir un acueducto que atraviese todo el país, refirió, es que hace treinta años se instalaron dos ductos para transportar petróleo desde Minatitlán y Coatzacoalcos, Veracruz, hacia la frontera con los Estados Unidos.
“Y esos dos ductos están vivos, y hasta donde yo sè pues si ya no hay refinería ya no transportan nada, de aquí para allá. Quién sabe si se los regalaron a los gringos para que nos mandaran de allá para acá”, afirmó.
El líder campesino señaló que es posible importar energéticos desde Alaska, pero a nadie se le ha ocurrido traer agua del sureste del país a los estados que sufren por la sequía.
Además, cuestionó que el estado de Chihuahua, pese a ser en gran parte semiárido, le dé agua a los estados de Sonora y Sinaloa, por la vertiente de la Sierra Madre Occidental, como también a Coahuila, Tamaulipas y Texas a través del río Bravo, mientras que algunos sitios se mueren de sed.
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