Con el cierre de las válvulas de la presa La Boquilla, este viernes a la medianoche concluirá de manera oficial el ciclo agrícola primavera- verano 2022; los usuarios del Distrito de Riego 005 solicitarán el cien por ciento de la concesión de agua para el próximo año, luego de dos ciclos restringidos debido a la sequía.
Mariano Jáquez Gandarilla, presidente de la Sociedad de Responsabilidad Limitada unidad Conchos, confirmó que el fin de semana finalizará el ciclo agrícola, el cual se salvó por las lluvias registradas en agosto y septiembre.
“Salimos bien, las cosas salieron bien gracias a la lluvia que nos llegó gracias a Dios, gracias a todos los técnicos y a todos los presidentes de los módulos, y pues bueno, estamos contentos la verdad y vamos a comenzar a trabajar en el próximo ciclo”, expresó el entrevistado.
Mencionó que se quedó a deber un poco de volumen de agua a los usuarios, sin precisar cuánto, pero se compensa por las precipitaciones pluviales que aportaron bastante humedad a los campos de cultivo.
El presidente de la SRL señaló que en la primera quincena de octubre debe estar listo el plan de riegos para el próximo año, adelantando que los agricultores consensaron solicitar el cien por ciento de la concesión, lo que hará posible cultivar las cerca de 70 mil hectáreas que comprenden este distrito.
Recordó que él en lo particular proponía pedir el 80 por ciento de la concesión para ahorrar agua, previendo que pudiera presentarse un año seco, pero la mayoría de los usuarios se inclinó por regar toda la superficie agrícola en 2023.
Mariano Jáquez manifestó que esta temporada invernal se espera sea fría y húmeda, con nevadas en la cuenca alta de los ríos Conchos y San Pedro, lo que genera escurrimientos hacia las presas La Boquilla y Francisco I. Madero.
Relacionado con el tema de las cuencas hidrológicas, si bien admitió que es necesario el pago por servicios ambientales por medio de trabajos de reforestación, aseveró que los agricultores se encuentran golpeados en sus bolsillos por los incrementos en los costos de los insumos, por lo que sólo podrán aportar conforme a sus posibilidades.
Se pronunció porque también los habitantes de los estados de Sonora, Sinaloa y Durango se sumen a la reforestación de las cuencas de los ríos, lo que contribuye a aumentar las lluvias y los escurrimientos de agua a las zonas agrícolas.