Cerca de las 22:00 horas del pasado lunes, elementos federales montaron un operativo en la zona de Ávalos, al sur de la ciudad, donde lograron capturar a decenas de migrantes, para llevarlos de regreso al estado de Chiapas, donde comienzan la travesía para cruzar por México y llegar a los Estados Unidos.
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Así lo confirmaron varios de los migrantes que se encuentran establecidos en la zona sur de la ciudad, quienes explicaron que la noche anterior, varios de ellos habían sido perseguidos y golpeados por los elementos del Instituto Nacional de Migración, como de la Guardia Nacional, en un operativo sorpresa realizado casi a la media noche.
Veníamos caminando, nos habíamos bajado del tren, llegaron y nos pararon, comenzaron a decirnos majaderías, uno me pegó con la pistola, sin deberle nada y hacerles nada, eran como seis unidades, no nos explicaron cual era el motivo, a una muchacha les quebraron los dedos, golpearon como a 15 personas en total" compartió Roberto un hondureño que acababa de arribar a la capital el lunes por la noche.
Comentó que a unos los alcanzar a capturar mientras se estaban bajando del tren, mientras otros corrían pero se pegaban en cercas y palos, porque en el lugar no existe nada de iluminación y ante el temor de ser asegurados corrían hasta lograr huir de los elementos federales.
A algunos que detuvieron y lograron escapar, comentaron que les quitaron sus pertenencias, como celulares y el poco dinero que tenían consigo, a otros algunas prendas y otros artículos que utilizan para su traslado por el país.
"Les pegaron, les apuntaron a las mujeres, una mujer se desmayó, las niñas se asustaron tremendo, tuvimos que tirar todo, documentación y todo, eran camiones tres, 8 combis, que salgan cabrones, nos decían, nos rodearon con perros, como si fueran delincuentes, en este momento los de migración son peores que los carteles" explicaron.
Comentaron que lo que hacen los elementos federales, es subirlos a las unidades y trasladarlos Tapachula en Chiapas, donde los vuelven a dejar y tienen que volver a comenzar el recorrido por todo México, ya que aseguran que no los deportan si quiera a su país de origen.
"Nadie se quiere quedar aquí, esto no se va acabar nunca si no nos regresan a nuestros países, quieren que volvamos a subir, porque en cada parada nos quitan 700/800 dólares, los teléfonos, la migración ya es un cartel que está haciendo negocio con los miles de migrantes que estamos recorriendo el país" mencionó una de las colombianas afectadas que se encuentra en el campamento improvisado.
Reiteraron que la intención es llegar a los Estados Unidos, y que si les permiten continuar el paso la problemática migratoria se terminaría, porque todos quieren cruzar y esperan que sean las autoridades norteamericanas las que decidan si permanecen o no en aquel país.
Los migrantes aseguran que conforme ha pasado el tiempo, las autoridades federales se han convertido más agresivos y han comenzado a realizar redadas violentas para capturarlos y regresarlos al sur del país.
Nota original en El Heraldo de Chihuahua