Para agilizar el acceso a las clases presenciales, el CBTa 90 generó un sistema al que los alumnos acceden a través de la página oficial. Se trata de un cuestionario Covid que deben responder en el trayecto a la escuela y al concluirlo se genera un código de barras.
Al llegar al filtro sanitario de la institución, con el apoyo del celular, cada joven pasa el código por un escáner. El sistema arroja información con los datos personales y el resultado del cuestionario. Este último determina si puede o no ingresar a clases.
El director del plantel, Hugo Orozco, comentó que en la corresponsabilidad de los estudiantes y de los padres de familia, cada joven tiene que acceder a diario a la aplicación Cuídate, donde responde a preguntas como si trae dolor de cabeza o ha estado cerca de una persona con el Covid.
“Todo es en línea, de tal manera que, por ejemplo, si un joven que se equivocó de día, que no le toca acceso a las clases presenciales, el sistema no lo deja entrar”, indicó.
El director entrante, Manuel Terrazas, quien asumirá de manera formal el primero de septiembre, comentó que durante el lunes sólo se detectó a un alumno con síntomas y se le regresó a su casa.
La enfermera permanente, Brenda Rodríguez, aseguró que los alumnos traen muy buena disposición. Indicó que el riesgo de contagio está en cualquier lugar, pues vamos a todas partes donde hay más aglomeración de personas. “Ya necesitamos volver a la normalidad”.
Hugo Orozco reiteró que de presentar un estudiante todos los síntomas de Covid dentro de un aula, se le aislará y todos sus compañeros se irán a sus casas a tomar las clases en línea.
“Nunca hemos trabajado de esta manera y en el camino tendremos que ir aprendiendo”, dijo.
Al interior del plantel habilitaron una nueva área de descansos en la explanada, con el objetivo de separar aún más las mesas que se utilizan para ello.
En total el CBTa 90 cuenta con mil 287 estudiantes, divididos en dos días de clases presenciales y tres en línea.