A pesar de estar al alcance de todos, los peatones prefieren rodear los dos túneles sanitizantes de las plazas Guillermo Baca y Principal, además se destaca que representan un riesgo ya que pueden colaborar a la propagación de infecciones.
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En el centro de Parral hay un par de túneles sanitizantes que se encuentran en la Plaza Principal y Guillermo Baca, no obstante, por medio de un recorrido y sondeo realizado en las inmediaciones de la locación citada se pudo constatar la falta de agua en una de ellas, así como el funcionamiento intermitente en otra, aunado a que la mayoría no les da uso
A plena luz del mediodía, con peatones circulando de arriba abajo por la explanada de la principal, la mayoría rumbo a las carpas que están afuera de los bancos mientras que otros más con dirección a la calle colegio, pero todos coincidiendo en algo; nadie pasó por el túnel que instalara el ayuntamiento de la ciudad.
Marcos Garibay, trabajador de un banco narra como desde antier por la tarde dejó de funcionar, aunque también menciona que cuando está en marcha la gente no pasa por ahí… “les vale sombrilla” menciona el entrevistado agregando que quienes utilizan el túnel son los mismos empleados de la institución bancaria, esto cuando finalizan su turno. Además detalló que, a lo mucho solo seis transeúntes le dan uso, esto al menos en el transcurso del turno que labora de 8 a 4.
Al llegar al pasillo, tal como lo mencionaron, estaba sin funcionar, ni siquiera estaba conectado, sin sorpresa, el tinaco que abastece los aparatos, ni siquiera contaba con líquido… el flotador tocando fondo.
El otro artefacto ubicado en la parada de los autobuses de la Plazuela Guillermo Baca, si contaba con suficiente agua, pero no estaba prendido, no obstante, unos minutos después, comenzó a trabajar, pero las personas que se bajaban del autobús no lo usaban, mientras que el aparato en ratos servía y en ratos no.
Aunado a ello, se vio a una cantidad innumerable de peatones que pasaban rodando la cabina, quienes preferían bajar de la banqueta, e invadir la cera por donde circulan los automóviles, antes que utilizar el instrumento, siendo sólo los vendedores de paletas chicharrines o dulces quienes pasan por ahí.
Cabe señalar que aunque hayan sido instalados con el fin de ayudar a combatir el Covid-19, estas cabinas sanitizadoras, representan un riesgo para las vías respiratorias, así como para el área de la vista, esto según lo dado a conocer por el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell.
“Se puede irritar la vía respiratoria y se pueden irritar los ojos, tan solo con la sustancia sanitizante, pero si suponemos que hay una persona que tiene Covid y que en su vía respiratoria está sacando virus, lo que va a ocurrir es que conforme la persona respira esas partículas de virus se van a estar movilizando y si el tiempo de sanitización no es el técnicamente recomendado … tenemos el efecto opuesto, riesgo de propagación de Infecciones” dijo el subsecretario en la rueda de prensa del 8 de abril de 2020.
Se puede resaltar que las instalaciones han sido en vano, por varios puntos, el principal fue resaltado por el subsecretario y a eso se le suma que no se utilizan por la mayoría, además de que no se les da un monitoreo constante.