Frente a la puerta principal de Palacio de Gobierno y la "Cruz de Clavos", mujeres de distintas partes del estado que participan en el #8M exigen justicia en el lugar donde fue asesinada la activista Marisela Escobedo en el año 2008.
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"Marisela, Marisela, Marisela", es el nombre que repiten las miles de protestantes en memoria de, quien señalaron "fue doblemente victima de manos feminicidas".
La voz de miles de mujeres que se han ido sumando a la marcha por el Día Internacional de la Mujer se mantiene desde su arribo al exterior del recinto gubernamental.
En el mismo lugar, el sonido de tambores acompaña el reclamo y estrofas de que han llamado el "sonido contra la violencia".
Poco a poco se han sumado más mujeres y a esta hora se estima que la cifra supera las 8 mil mujeres que traen consigo una historia propia de violencia.
En la Cruz de Clavos fueron colocadas coronas de flores, pues los feminicidios ocurridos señalan son contra todas las mujeres chihuahuenses.
A este punto de encuentro también han llegado hombres que acompañan a sus esposas, novias, hermanas, madres e hijas.
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