La asociación civil Alianza Sierra Madre (ASMAC) denunció que seis años después de que fuera arrebatado la vida del activista y protector de los bosques de Chihuahua, Julián Carrillo Martínez, continúa la tala ilegal; y la inseguridad que obliga a la familia del activista asesinado a vivir en condición de desplazamiento forzado.
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“Hoy 24 de octubre del 2024, recordamos al defensor del territorio y bosque Julián Carrillo Martínez. A seis años de su cobarde asesinato, tanto a su familia, como a su comunidad y sus compañeras y compañeros de lucha y al bosque, -nos- les sigue haciendo falta”, expresó ASMAC a través de un comunicado.
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Alianza Sierra Madre expresó que este jueves 24, honran la memoria de Julián Carrillo Martínez y su incansable labor como defensor de su comunidad Coloradas de la Virgen, en el municipio de Guadalupe y Calvo, en la zona sur del estado de Chihuahua.
Recordaron también, de la defensa que realizó de su territorio contra las mineras y de la protección que le brindó al bosque con sus acciones al ser un líder que no solo informaba a quienes integraban su comunidad sino organizaba y guiaba para denunciar las amenazas que les acechaban.
“Julián vivirá en la eternidad. Cada pino que aún permanece en su comunidad nos recuerda su valentía. Las lluvias que ahora faltan nos hacen saber que él tenía razón cuando decía “el bosque nos alimenta y nos abraza cuando hay frío o cuando hay sol”, compartieron.
Señalaron que después de seis años del asesinato, y desde entonces su familia fue obligada a desplazarse de manera forzada, los años siguientes sus compañeras y sus compañeros de luchas junto con sus familiares también han tenido que dejar el territorio que tanto han defendido sin que hasta ahora se vislumbre la posibilidad de un retorno en condiciones de seguridad.
“Reconocemos que en el caso del defensor hay avances, pues dos de los cuatro asesinos materiales fueron juzgados y sentenciados. Sin embargo, la justicia de este asesinato y otras atrocidades en su comunidad no ha alcanzado a los autores intelectuales. En su comunidad la tala ilegal continúa, sin que las autoridades intervengan para frenarla, lo que condiciona que su familia y su comunidad aún continúen esperando verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición que les proteja y les ofrezca una vida libre y digna”, afirmaron.
Para finalizar, Alianza Sierra Madre, como organización acompañante de las familias que ahora se encuentra en condición de desplazamiento forzado interno, hizo un eco de sus voces en la exigencia de un retorno digno y seguro al territorio que tanto anhelan regresar.
Nota original en El Heraldo de Chihuahua
