Para empezar nuestro pequeño artículo, comenzaremos presentándonos… Somos alumnos de cuarto grado en la escuela primaria Héroes de la Revolución, localizada en la ciudad de Parral, Chihuahua.

Nos gustaría hacer una reflexión sobre la calidad de vida que enfrentamos los niños y las niñas en nuestra escuela y colonia Héroes de la Revolución. ¿Alguien se ha preguntado qué significa calidad de vida? Pues se refiere a un bienestar general que obtiene una persona en los ámbitos de salud, vivienda, educación y alimentación.

La duda que crece en nosotros, es ¿Por qué no todos los niños podemos acceder a ella? Antes de la llegada de la pandemia, en nuestra escuela y colonia ya había problemas con el desabasto de agua, los servicios básicos, el desempleo y la solvencia económica. Este tipo de problemáticas son parte de la realidad en nuestros hogares y junto a todo esto, no todos tenemos cubierto el acceso a un sistema de salud digno.

El tema educativo se ha convertido en un discurso discriminatorio pues en la mayoría de los casos carecemos de lo básico para sobrevivir dignamente ¿Cómo accedemos a la educación en casa? El dinero no alcanza para comprar una computadora, para contratar un servicio de internet, para poner “saldo” y mandar evidencias de trabajo.

Hablar de educación se ha reducido solo a palabras vacías que confirman una ignorancia absoluta de las condiciones en las que vivimos la mayoría de los ciudadanos. ¿Qué nos tocará vivir después de esto? ¿En qué condiciones regresaremos a nuestra escuela?

La gente habla de regresar a la “normalidad”, pero ¿Vivir entre la carencia es la normalidad? Ya teníamos nuestra propia pandemia, ¿Quién la cura? La calidad de vida es un tema de análisis político y social que los gobernantes no pueden hacer a un lado en tiempos como estos.

Esperamos que nuestro artículo pueda ser de ayuda para mirar un horizonte más lejano del que ahora percibimos, nos motive a organizarnos como una sociedad que planta cara ante los problemas y así, en un futuro, erradiquemos las pandemias, también las que siempre han sido nuestras.