Realizan blindaje sanitario en la zona serrana. Los municipios de Balleza y Guadalupe y Calvo, apoyan el aislamiento de Guachochi para evitar la propagación del virus, dado que de llegar a las comunidades indígenas, sería un reto para el que las autoridades sanitarias no están preparadas.
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Los contagios de Covid-19 en la zona serrana no son un tema menor, incluso revisten un reto mayor que en los centros urbanos, aseguro el alcalde Guadalupe y Calvo tras el convenio que tuvo con los munícipes de Balleza y Guachochi en torno a los contagios de este último municipio.
Más que cercar la zona serrana, la estamos blindando. Las medidas preventivas de los puestos de control ya se habían desplegado desde días atrás.
Sin embargo, ahora las medidas se radicalizaron. El blindaje ha sido posible por la disposición de trabajar en equipo entre quienes compartimos identidades y problemáticas similares.
Se han logrado convenios para lograr que a todos nos vaya mejor al enfrentar la pandemia, así podría sintetizarse el acuerdo central de la reunión telefónica entre Noé Chávez, Hugo Aguirre y Arturo Medina, presidentes de Guadalupe y Calvo, Guachochi y Balleza.
La alerta se propagó desde el momento mismo que se supo hace dos días que había un contagio en Guachochi. Se intensificó desde ayer al confirmarse un segundo y la cuarentena de seis personas más que se encuentran en la calidad de sospechosos para las autoridades sanitarias.
Una de las primeras medidas que se convenio, dijo el presidente municipal de Guadalupe y Calvo, fue suspender la ruta de transporte terrestre que va de Guachochi a Baborigame –Guadalupe y Calvo - Se trata de exponer lo menos posible a la gente.
No es una medida impositiva, aclaro el munícipe. Fue el alcalde de Guachochi quien habló con los propietarios de la empresa que presta ese servicio, porque las oficinas están en aquel lugar y ante los contagios, la propietaria se solidarizó con esa suspensión.
Agregado a ello, se tuvo acercamiento con José Manuel Chaparro, mejor conocido como Jomacha, quien presta el servicio aéreo entre los tres municipios y también acepto suspender temporalmente los vuelos.
El alcalde mencionó que se están tomando estas medidas que pueden ser duras, pero necesarias, pues afirmó que un brote de esta enfermedad en la zona serrana representa mayores retos que en la zona urbana.
En estos lugares se carece de todo, iniciando por lo esencial, el servicio médico, caminos para llevar a las miles de comunidades diseminadas a lo largo del territorio de estos tres municipios y sobre todo la idiosincrasia del indígena que no fácilmente pide ayuda o se acerca a las unidades médicas, para cuando nos demos cuenta de un contagio en la región, la propagación habrá sido mayúscula, dada su naturaleza nómada ya que los individuos de estas comunidades están en constante movimiento.
Agregó que, en su caso, hace una semana ya había suspendido el servicio de transporte del barranco, el que va de Dolores a Culiacán, Sinaloa, dados los altos índices de contagios en ese municipio serrano. El dueño del transporte lo entendió así y aceptó la medida, ya que es importante mantener sano el municipio.
La ruta terrestre que va de Parral a Guadalupe y Calvo se mantiene, sin embargo, hay negociaciones adelantadas con los dueños, de que, en caso de existir un contagio en algunos de los puntos del trayecto, también se suspenderán.