CHIHUAHUA, Chih., (OEM-Informex).-- Por segundo día consecutivo, se realizó ayer la continuación de la audiencia inicial, dentro de la causa penal número 1687/2017, en contra del empresario Sergio Medina Ibarra por el delito de peculado.
El expresidente de la Liga Estatal de Béisbol fue detenido hace más de un año por la FGE por presuntos desvíos multimillonarios en el anterior sexenio.
Sergio Medina Ibarra, exfuncionario de la administración de César Duarte, realizó 28 pagos y transferencias bancarias para adquirir una planta de minerales y el club deportivo de los Mineros de Parral.
En la causa penal 1687/2017, se señaló que Sergio Medina Ibarra aprobó el desvío de 379 millones de pesos mediante la adjudicación directa con la empresa “Asesorías y Servicio a Informáticos Online, S.A. de C.V.” en complicidad con otros colabores y personas externas al servicio público.
En el periodo de febrero a octubre de 2016, el imputado simuló un procedimiento administrativo de prestación de servicios mediante la adjudicación directa con la empresa “Asesorías y Servicio a Informáticos Online, S.A. de C.V.”
En complicidad con otros colabores y personas externas, Medina Ibarra aprobó la cuantiosa cantidad en 28 pagos y transferencias bancarias, al fingir la realización del dictamen de excepción a la licitación, acta de adjudicación directa, contrato y facturación a favor de la empresa creada en diciembre del 2012 de la cual no existe registro.
En las entrevistas de los testigos, quedó asentado que el desvío millonario le fue encargado a Gerardo Villegas Madriles y quienes operaron tal acción fueron el entonces director general de administración, Carlos Hermosillo Arteaga, quien firmó y el imputado persona que autorizó, y quienes además en 2015 no ejercían dichos cargos; sin embargo, lo firmaron como tal con fecha 2 enero de 2013.
Quienes participaron desarrollaron negocios personales en su beneficio, como la compra de viviendas, predios rústicos aquí y fuera del estado, como en Quintana Roo, así como la compra de ganado bovino; en el caso de Sergio Medina le permitió adquirir la planta de minerales Real de Biesma, municipio de Parral y el club deportivo Mineros de Parral, señaló el Ministerio Público.
La red de corrupción estaba distribuida por titulares de secretarías y equivalentes que participaban en políticas públicas y en el desarrollo del plan de gobierno, así como directores generales, directores y jefes de departamento que atendían a la operación de los recursos para su desvío y empleados de Gobierno, con el fin de mantener la operación técnica y burocrática en atención a la sociedad.
El 9 de junio del 2017 por la noche fue detenido Sergio Ibarra Medina quien cumplió ya más de un año de prisión preventiva.