Habitantes de la comunidad de El Verano se quejan de que se les están surtiendo agua de un pozo contaminado y que la Jmas está poniéndole mucho cloro para su consumo, es por ello que manifiestan que ya no están usando esta agua para beber, y ya se presentaron casos de personas que se enfermaron del estómago. Por su parte, la Junta de Aguas indicó que por ley se le tiene que poner cloro al agua y está dentro de los parámetros permitidos.
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El agua que se surte en la comunidad de El Verano está a cargo de la Jmas de Parral, debido a un convenio que tiene la Junta con los ejidatarios, ya que Parral extrae el agua de los pozos del Verano, es por ello que uno de estos pozos está destinado a surtir el agua del poblado; sin embargo, consideran habitantes de la comunidad, que el agua de este pozo se encuentra contaminado y es por ello que le están poniendo mucho cloro al líquido, según señalan pobladores, esto ocasiona que se enfermen del estómago.
Entre las personas afectadas se encuentra Arlyn Alcalá quien, quien menciona que en el poblado hay constantes fugas de agua en las calles y sufren cortes en el suministro; sin embargo, el agua que están surtiendo al pueblo es de un pozo de agua en donde se encuentra un drenaje cerca de este pozo y que la Jmas de Parral le está echando excesivo cloro para el consumo de los habitantes.
Por lo que indicó que ellos mejor buscan el agua de otro pozo para consumo, ya que se han enfermado del estómago. Señaló que el agua que les están surtiendo sale espumosa y blanca, dijo que, incluso los niños de la escuela primaria ya se han enfermado, los de la Junta hacen su “pruebita” y salen con que todo está bien, incluso el sabor del agua sabe mal. Sabe mucho a cloro, mencionando la afectada, que el personal de la JMAS le ponen unas “pastillotas” de cloro.
Angélica Alcalá, otra de las afectadas, indicó que por las mañanas cuando llega el agua huele mucho a cloro y está muy espumosa, se tiene que dejar correr un tiempo para que salga todo el cloro, “ya no tomamos agua porque nos duele el estómago”.
Dijo que entre más agua toma uno más le duele el estómago, y agregó que en su casa mejor compran un garrafón en Parral cuando vienen a la ciudad, nunca se comparaba ya que era agua del pozo, hubo una temporada en que se enfermaba mucha gente pero ahora en las familias compran filtros o ya compran agua de garrafón.
Por su parte, el presidente de la Jmas, ingeniero Víctor Gutiérrez, indicó que es pura especulación la versión de estas personas, ya que no tienen pruebas de laboratorio, señalando que por ley le ponen cloro al agua, dijo que cada 15 días le están haciendo pruebas de laboratorio donde sale con los parámetros normales, se le tiene que poner cloro ya que si no la COESPRIS multaría a la JMAS.