Parral, Chih.- Hoy se conmemora el Día Mundial de la Abeja, el apicultor Gonzalo Lugo Espinoza, quien tiene 49 años en la producción de miel, indicó que no se le ha dado a las abejas la importancia que merecen. Es una especie que se encuentra en peligro de extinción debido a las sequías y al hombre, además el gobierno no está facilitando recursos a los apicultores para la producción de miel, siendo esta una de las actividades productivas donde han mermado el número de productores en la región.
Fue en octubre de 2017 cuando se proclamó el 20 de mayo como Día Mundial de las Abejas por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, coincidiendo cuando nació Anton Jansa, quien en el siglo XVIII fue pionero en las técnicas modernas de apicultura en su país natal, Eslovenia y reconoció a estos insectos por su habilidad para trabajar.
Gonzalo Lugo Espinoza, apicultor de la región, señaló que este día es un recordatorio para dar mayor importancia a este insecto tan benéfico para el hombre, ya que el objetivo principal es proteger a las abejas y a otros polinizadores para que puedan contribuir de forma significativa a resolver los problemas relacionados con el suministro de alimentos en el mundo y acabar con el hambre en los países en desarrollo.
Lugo Espinoza se ha dedicado por 49 años a la actividad apícola y dijo que además de la producción de miel que dan las abejas, cumplen con una función bastante importante en la cadena alimenticia de todas las especies, la cual consiste en polimerizar las plantas del planeta, desafortunadamente la población de abejas ha disminuido en un 50 por ciento, debido principalmente por las sequías, parásitos de las abejas y al uso indiscriminado de insecticidas por el hombre.
También refirió que las abejas se encargan de polimerizar más del 70 por ciento de los alimentos que consumimos, entre los que se encuentran las frutas y verduras, así como todo tipo de granos como el trigo, la avena, la cebada, el maíz y el frijol.
Además, polimerizan el 90 por ciento de las plantas fanerógamas (toda planta que da flor), indicó que su trabajo es tan especializado que es un insecto difícil de sustituir, sin ellas, los alimentos que hoy consumimos desaparecerían al no ser polinizados por las abejas, también polinizan más de 25.000 especies de plantas con flores.
Señaló el ingeniero que las abejas utilizan el polen y el néctar de las flores para alimentarse o para producir miel, por lo que a la vez que se alimentan y recolectan polen de los estambres de las plantas, transfieren semillas, la supervivencia de esta flora depende de la actividad directa de las abejas.
Por otra parte, dijo que las abejas no solo ayudan al planeta en la polinización de plantas con su trabajo, ya que además proporcionan al hombre diversos productos que tienen muchos beneficios para la salud. Algunos de ellos, la miel, el producto más conocido de las abejas con múltiples propiedades para nuestra salud. Es energética y vigorizante, además de desinfectante y cicatrizante. Ayuda a hacer la digestión y con los síntomas del resfriado y los catarros.
Además, las colmenas de abejas producen jalea real; este néctar solo lo usan en la colmena las abejas reinas, de ahí sus excelentes propiedades para la salud. Ayuda a mejorar la circulación sanguínea, tiene efectos vasodilatadores y ayuda a controlar el colesterol y glucosa en sangre. También el propóleo, que tiene propiedades analgésicas y antibacterianas y se usa para mejorar catarros, dolores de garganta y para enfermedades respiratorias o cardiovasculares.
Para finalizar, el experimentado apicultor comentó que las abejas están íntimamente ligadas a la actividad agrícola humana, siendo un escalón dentro la cadena alimenticia, si este eslabón se pierde causaría estragos importantes en el ecosistema, así como también desafortunadamente la producción de miel ha disminuido en la región, en diez años sólo un tercio de los productores continúan con esta actividad, en Parral de 15 apicultores están trabajando alrededor de cinco de ellos.